El PP balear ha rehabilitado a Gabriel Cañellas, el expresidente del Gobierno autónomo que fue obligado por el presidente del Gobierno, José María Aznar, a dimitir de todos sus cargos por su implicación en el caso Sóller en 1995. Cañellas ha aceptado ayudar al candidato Jaume Matas a intentar ganar las próximas autónomicas y recuperar el poder en Baleares, que éste perdió en manos de los partidos del Pacte de Progrés en 1999.

CONDENA POR COHECHO

En el PP nadie parece recordar que Cañellas fue condenado por cohecho por el caso Sóller. Los jueces consideraron en 1997 que el exlíder conservador había adjudicado la obra de un túnel en la carretera que conduce a esta localidad mallorquina a un antiguo socio a cambio de una comisión de 300.000 euros (50 millones de pesetas). La prescripción del delito evitó que Cañellas tuviese que cumplir condena.

Matas es consciente de que sólo Cañellas --apartado de la vida política desde 1999-- es capaz de arrastrar el voto de los electores más conservadores de Baleares y tratar de compensar así la desafección de quienes discrepan de la posición del PP en la guerra de Irak.

REUNIÓN PARA RECABAR APOYO

Es por ello por lo que, hace cerca de un mes, el candidato del PP a la presidencia balear se reunió durante más de tres horas con Cañellas para convencerle de que mostrase en público que apoya su candidatura.

Aunque las relaciones entre el expresidente Cañellas y su sucesor se han deteriorado durante los últimos años, aquél apareció en primera fila en el acto de presentación del candidato popular. "No hablaré en los mítines, pero sí estaré presente en los actos más importantes que haga el PP", reconoció entonces Cañellas.

MUESTRA PÚBLICA

En un acto político celebrado hace unos días, el expresidente Cañellas se fundió en un abrazo con Jaume Matas ante la presencia de unos 2.000 afiliados conservadores, que aclamaron a su antiguo presidente, quien ha anunciado que asistirá a los actos más relevantes de la campaña electoral del candidato popular. "Cañellas es nuestro presidente", reitera Matas en público.