Andalucía conseguirá una inversión similar a la lograda por Cataluña cuando se apruebe la reforma de su Estatuto de autonomía. En las enmiendas que el PSOE registró a última hora del pasado martes se acepta que las inversiones del Estado en esta comunidad tengan como referencia el criterio de población, por lo que ascenderán a un 18% en siete años.

El otro punto significativo, la definición como "realidad nacional", se mantiene en las enmiendas tal y como se aprobó en el Parlamento andaluz. Aunque, y para atraer al PP al consenso, los socialistas han incluido referencias a la indisolubilidad de España.

Para el portavoz socialista en el Congreso, Diego López Garrido, las enmiendas de su grupo se encaminan a respetar lo que denominó "la trilogía de oro", es decir, la unidad de la nación, un mayor autogobierno y la solidaridad interterritorial. López Garrido aseguró que los socialistas desean el máximo consenso para sacar adelante una reforma "dirigida a conseguir un Estado eficaz y unitario". En este sentido, el portavoz del PSOE pidió al PP que no sospeche que va a "debilitarse" la unidad de España.

El sistema de financiación obedece al criterio del peso de la población --Andalucía supera los 7.900.000 habitantes-- por lo que las inversiones del Estado en la comunidad equivaldrán al 17,8% del total, una cifra casi idéntica a la del Estatuto catalán, aunque en el catalán el criterio sea el Producto Interior Bruto (PIB) en vez de la población.

En una de las 116 enmiendas presentadas por el PP, se solicita que el Estado invierta 4.500 millones de euros en los próximos siete años.

Aunque las enmiendas socialistas mantienen el reconocimiento de la deuda histórica, se han suprimido los seis meses para que el Estado la liquide. El diputado andaluz y portavoz de política autonómica, Alfonso Perales, manifestó que la reclamación "no tenía cabida desde el punto de vista jurídico".