Bagdad "Échame una mano", decía un tripulante que sobrevivió al derribo de un helicóptero civil en Irak. Los insurgentes obligaron al herido a levantarse, le ordenaron huir, y entonces lo remataron a tiros, al grito de "Alá es el más grande". Las fotos son del vídeo difundido por internet. Arriba, el tripulante está aún vivo, abajo, tras ser abatido.