En una carta publicada ayer por un diario árabe, Barzan Ibrahim al Tikriti, antiguo responsable de los temidos servicios secretos de la dictadura y hermanastro de Sadam Husein, rogó ayer a varios líderes mundiales, entre ellos al presidente de EEUU, George Bush, que le ayuden a salir de prisión para ser tratado del cáncer que padece en la espina dorsal. Tikriti es uno de los siete dirigentes del régimen iraquí que es juzgado por su presunta implicación en la matanza de civiles shiís en Dujail.
"Ruego al presidente Bush, en nombre de la justicia y de los principios de democracia y derechos humanos que defiende Estados Unidos, que ordene mi puesta en libertad, para así poder recibir tratamiento para la peligrosa enfermedad que padezco", escribe. Tikriti pide ayuda también a Tony Blair y al conjunto de líderes árabes.
