La actual competencia de las cooperativas con unos comercios privados que, de forma mayoritaria, están comprando la fruta sin precio en el campo, ha puesto en una complicada situación a diversos grupos cooperativos. Aunque en algunos casos las liquidaciones han sido bastante favorables, en otros, los productores no han podido recuperar ni el dinero de su cuota.

El secretario técnico de Fepac-Asaja, Doménec Nácher, explicó que "como las cuotas de pago a una cooperativa suelen ser a cinco años, puede pasar que, tras tres años con liquidaciones muy bajas, algunos agricultores no hayan recuperado el dinero".

El gerente de Anecoop, Juan Safont, explicó que mientras los agricultores reciban menos de 0,12 ó 0,15 euros por kilo, que es lo que cuesta producir la fruta, "es normal que haya gente que abandone cooperativas o deje de producir para comercios privados". Recordó que algunos abandonan el campo por la presión urbanística "porque si dejan de cultivar tres años antes de urbanizar, evitan pagar el 15% de impuestos".