Según el último informe del Instituto Nacional de Estadística (INE) sobre el consumo hídrico, en las redes públicas de distribución se perdió el 17,9% del agua debido a fugas o roturas. Este porcentaje es ligeramente más elevado que en la provincia de Castellón --entre el 10 y el 15%--. En la capital, estas pérdidas representan el 9%, aproximadamente.

Con todo, la red de abastecimiento provincial presenta algunos problemas. De hecho, casi una quinta parte del suministro "no se contabiliza en ningún momento, debido a conexiones ilegales, baldeos de algunas calles...".

Asimiso, en algunos municipios existen zonas con deficiencias de presión en la red, lo que dificulta el suministro a las viviendas.