La música como puente entre culturas, como elemento totalizador. La música como ejercicio de conciencia y responsabilidad, como promotora de los derechos humanos. La música como salvavidas, herramienta clave de nuestra supervivencia intelectual. La música es sinónimo de libertad, nos alegra, nos entristece, nos activa, nos hace bailar, nos emociona.
El ritmo y la expresión de una composición puede estrechar la frontera entre lo real y lo divino. Es, como afirmara Ludwig Van Beethoven “una revelación más alta que ninguna filosofía”. Y es que, si algo dota de sentido todo ese conglomerado de experiencias vitales que cada uno de nosotros protagoniza es, precisamente, la música. Desde tiempos prehistóricos el ser humano ha necesitado de este lenguaje mágico para expresarse. A lo largo de los siglos, los sonidos han ganado complejidad, pero su finalidad sigue siendo la misma: alimentar el alma.
Tal es la fuerza que ejerce la música en nosotros, que resulta justo y necesario aprovecharse de ella para transmitir mensajes de esperanza y solidaridad en un mundo de extremos contrastes como el nuestro. Eso es posible porque la música no entiende de lenguas, sexo y raza, va mucho más allá. Sin límites que valgan, la idea de crear proyectos musicales que sirvan de embajadores de la concordia es digno de admirar.
the world orchestra
Inspirado por la idea de Sir Robert Mayer, creador de los conciertos para jovenes allá en la década de los años 20 del pasado siglo, fue Igor Markievich quien tras la Segunda Guerra Mundial, empezó a reunir las orquestas internacionales como símbolo de esperanza y futuro. Sin duda, el ideal de Markievich resultaba extraordinario, pues en un periodo donde toda Europa estaba en plena reconstrucción, la música aportó la pizca de ilusión necesaria para no sumirse en la oscuridad.
Más de 50 años después, en 2004, el director valenciano Josep Vicent asumió la titularidad de la orquesta de Juventudes Musicales relanzando el proyecto que en su día imaginara Markievich, logrando actuar en salas tan emblemáticas como la Philarmonie Berlin, Konzerthaus Viena, Oxford Festival, Auditorio Nacional de España, Muziekgebouw Amsterdam, Palau de Les Arts, Beijing Philarmonie..., además de protagonizar giras por Chipre, Austria, Alemania, Holanda, Canada, China y España. Este sería el inicio de lo que hoy conocemos como The World Orchestra, un proyecto renovado gestionado por East-West Music en colaboracion con las Juventudes Musicales de España e impulsado por su presidente Jordi Roch. Esta formación joven, solidaria e internacional, sitúa a la música en otro plano para utilizarla como medio comunicador de ideas, como escenario para divulgar la implicación social de los jóvenes de más de 50 países que la forman --Alemania, Argelia, Argentina, Armenia, Australia, Austria, Bélgica, Bolivia, Brasil, Bulgaria, Canadá, Chile, China, Chipre, Colombia, Corea del Sur, Costa Rica, Croacia, Cuba, Dinamarca, Eslovenia, España, Estados Unidos, Estonia, Francia, Grecia, Holanda, Honduras, Hungría, Irlanda, Israel, Italia, Japón, Letonia, Lituania, Macedonia, Méjico, Noruega, Paraguay, Polonia, Portugal, Puerto Rico, Reino Unido, Rumania, Rusia, Serbia, Suecia, Suiza, Tailandia, Taiwán, Turquía, Ucrania, Uruguay, Uzbekistán, Venezuela, República Dominicana, Irán...--
La TWO tiene muy claro que todos y cada uno de sus proyectos responden a un mismo objetivo: trasmitir un mensaje solidario por todo el mundo con su modelo de multiculturalidad y convivencia a través de la música y servir como plataforma para el diálogo y la interacción solidaria de diferentes civilizaciones y países. Asimismo, acercar la música a públicos más diversos y jóvenes, a través de repertorios y puestas en escena más dinámicas y modernas, así como el uso de nuevas tecnologías, es otra de sus características.
Como cabría esperar, crear una plataforma para los jóvenes músicos de todo el mundo es dar un salto enorme en el ámbito de la música profesional. A la vista de los acontecimientos, es un salto que les ha funcionado perfectamente. Por si fuera poco, como formación con sede en España, se han erigido en embajadores de nuestra cultura apoyando a los jóvenes músicos, directores y compositores del país, ademças de promover la música, las lenguas y las culturas de España en todo el mundo.
el director
Josep Vicent podría ser etiquetado sin problema alguno como “el director de los jóvenes”. Su trabajo al frente de The World Orchestra le ha llevado a ser premiado este año 2013 por la Comunidad Europea. Este reconocimiento les ha servido para erigirse en promotores de la cultura europea a través de las actuaciones que han llevado a cabo en Sudáfrica, Balcanes, Holanda, Francia y España en una gira histórica. Pero su faceta no acaba ahí, puesto que Vicent ha realizado más de 30 registros discográficos para sellos históricos y prestigiosos como Deutsche Grammophone, Virgin Records, Columna Musica, Etcetera Records, RBA y Composers Voice, de entro los que destaca su grabación de ‘La Consagración de la Primavera’ de Igor Stravinsky.
Ahora, director y joven orquesta ofrecerán mañana lunes, 18 de noviembre, una actuación en el Auditori i Palau de Congressos gracias al soporte de Marina d’Or y la Universitat Valenciana Internacional (VIU).
actuación
The World Orchestra, con sus 80 músicos procedentes de todo el mundo, interpretarán un programa con obras de Maurice Ravel y Sergei Prokofiev. Concretamente, el conjunto deleitará al público con ‘La valse’ y ‘Shérérazade’, del compositor francés; y las suites I y II del ‘Romeo y Julieta’, del autor ruso. La primera de las piezas es un poema coreográfico para orquesta que Ravel compuso entre 1919 y 1920 y que está dedicado a su amiga Misia Sert, nacida Godebska. La obra fue estrenada públicamente el 12 de diciembre de 1920, interpretada por los Concerts Lamoureux dirigidos por Camille Chevillard. En cuanto al ‘Shéhérazade’, destacar que es el título de dos obras del compositor francés; por una parte, el músico creó una “ouverture de féerie”, una obra para orquesta, y por otro, resulta también un ciclo de canciones para soprano y orquesta. Para la ocasión, TWO contará con la colaboración de la soprano Ángeles Blancas, considerada como la mejor de su generación y la más internacional gracias a sus impresionantes cualidades vocales, tímbricas y musicales, así como en sus grandes dotes escénicas, que la han convertido en una artista indispensable en muchas de las programaciones del panorama operístico.
La segunda parte del programa tendrá un marcado carácter “shakespeariano” con la representación de dos de las tres suites oquestales que componen el ballet ‘Romeo y Julieta’ de Prokofiev. Sin duda, esta es una de las obras más apreciadas del compositor, en base a la alta inspiración melódica, la gran variedad rítmica y el carácter memorable de los temas principales --el célebre y siniestro ‘baile de los caballeros’ y sus diversas variaciones; el delicado y abundante tema de Julieta--. Piezas de extraordinaria belleza.
concierto benéfico
Esa tendencia por fomentar el diálogo y la interacción solidaria entre civilizaciones que persigue The World Orchestra sirve de genial preludio para otro de los conciertos que tendrán lugar esta próxima semana en el Auditori. Hablamos del concierto de gala benéfico que ofrecerá la Orquesta Sinfónica del Conservatorio Superior Salvador Seguí de Castellón a favor de COCEMFE, con motivo de su 25º aniversario. La cita, para que la vayan apuntando ya en su agenda, tendrá lugar el próximo domingo, 24 de noviembre.
Esta actuación de marcado carácter filántropo busca recaudar fondoso para destinarlos al mantenimiento de los programas que habitualmente desarrolla COCEMFE en la provincia de Castellón. En los tiempos que corren, donde la coyuntura económica apenas permite financiar proyectos con la calidad suficiente, resulta imprescindible buscar alternativas que faciliten la puesta en marcha de cualquier campaña en favor de las personas con cualquier tipo de discapacidad física y orgánica. Por eso, bajo la dirección de José Luis del Caño, y con la participación del pianista Arcade Tribol, la soprano Anna Schwedhelm, la mezzosoprano Natalia Lunar, el tenor Eduardo Sandoval y el barítono Pedro Quiralte, tendremos la oportunidad de formar parte de una acción justa y necesaria de ayuda y solidaridad.
El programa para este concierto tan singular tiene como gran protagonista al compositor alemán Ludwig Van Beethoven. Del Caño dirigirá diversas piezas del genio entre las que destaca su Sinfonía nº 9’, sin duda, una de las obras más trascendentales, importantes y populares de toda la música clásica, y también de toda la música y del arte. Su último movimiento es un final coral sorprendentemente inusual en su época que se ha convertido en símbolo de la libertad. Precisamente, una adaptación de la pieza sinfónica, realizada por Herbert von Karajan es, desde 1972, el himno de la Unión Europea. Música solidaria. H
