Queda apenas un mes para que este 2019 baje el telón y conozcamos el balance oficial de un año extraño para el sector del automóvil.

La incertidumbre que ya se dejó notar a finales del 2018 ha tenido continuidad en estos últimos meses, propiciando preocupación tanto entre las marcas como en sus redes de concesionarios.

Los datos acumulados a 31 de octubre hablan de un descenso de las matriculaciones del 6,3% en el mercado de turismos y todoterrenos, que se acentúa todavía más en el canal de particulares, en el que la caída es de más de 12 puntos con respecto a las cifras del año anterior.

Aunque es evidente que el momento político que vive el país -sumido en una continua campaña electoral- no ha aportado serenidad, la falta de mensajes claros en relación con la electrificación y el futuro a corto plazo de los combustibles fósiles sigue siendo uno de los motivos principales del estancamiento de las ventas.

El nuevo gobierno tendrá que ponerse las pilas con este tema y plantearse medidas para la revitalización de un sector estratégico como el del automóvil.