En el último balance ofrecido ayer por la Generalitat, la provincia de Castellón sumó 19 nuevos casos de coronavirus, con otro brote de ámbito social en la capital de la Plana, que un día antes había registrado uno con tres contagios de la misma índole. Y es que el repunte de positivos en Castelló preocupa, teniendo en cuenta que, a fecha de 17 de agosto, tenía 71 confirmados por PCR en los últimos 14 días.

En cuanto, al brote de Sant Mateu, que afecta a seis personal, Sanidad aclaró que no está relacionado con el ocio local, como informó un día antes, y es de carácter comunitario. En concreto, según la alcaldesa, Ana Besalduch, afecta a una familia y, en principio, está bajo control. También se da por controlado el brote de Vistabella, con 12 casos, cuyo foco estuvo en el contacto de varios jóvenes. El alcalde, Jordi Alcón, informó ayer de que las pruebas PCR realizadas 14 días después a todos los contactos han dado negativo, mientras los infectados del virus evolucionan de una forma favorable.

Un dato negativo que arroja el balance diario de la Conselleria de Sanidad es el que hace referencia a los ingresos, ya que tras semanas sin enfermos en la unidad de cuidados intensivos (UCI), uno de los siete hospitalizados está en estado crítico.