Tener un hijo puede ser el momento más feliz de la vida de una mujer, pero también convertirse en un drama si es inesperado y no ha llegado el momento oportuno. Cada año unas 200 adolescentes de Castellón se quedan embarazadas. Y un embarazo adolescente es casi siempre indeseado. Esto es algo que apenas plantea dudas a psicólogos y trabajadores sociales con años de experiencia en maternidad juvenil. Casi ninguna adolescente a los 16, 17 ó incluso 19 años pensó en convertirse en madre hasta que el test correspondiente dio positivo. No buscaban un hijo. Pero aun así, la mitad de ellas decidió seguir adelante con la gestación. La otra mitad optó por abortar.

El Instituto Valenciano de Estadística acaba de hacer públicos los datos sobre el Movimiento Natural de la Población por comarcas. En el último año, en Castellón se registraron 93 nacimientos de madres menores de 19 años. En cinco partos, la mujer todavía no había cumplido los 16.

Pese a que la cifra puede parecer llamativa, los valores están lejos de las de hace ocho años. En el 2004, las menores de 19 años que decidieron dar a luz fueron 196 en la provincia, un 53% más que durante el último año. Fue a partir del 2008, coincidiendo con el inicio de la crisis, cuando los partos de adolescentes empezaron a bajar, coincidiendo con el frenazo de la llegada de inmigrantes.

En la cifra de las 93 menores de 19 años que el año pasado dieron a luz en Castellón no están todas las que son. Faltan las adolescentes que se quedaron embarazadas y optaron por interrumpir de forma voluntaria su gestación. En el 2015 fueron 94 en Castellón, según cifras de la Conselleria y del Ministerio de Sanidad. Y con los abortos ocurre prácticamente lo mismo que con los embarazos de adolescentes: bajan cada año. Los 94 del año pasado están a mucha distancia de las 160 interrupciones voluntarias practicadas a menores de 19 años en el 2007.

RELACIONES A LOS 16 // Las cifras van a la baja, pero que 187 adolescentes se queden embarazadas cada año en la provincia es algo que preocupa a los especialistas, y lo hace porque cada vez las relaciones sexuales se inician a edades más tempranas. Hoy, las chicas empiezan a los 16 años, según la Sociedad Española de Contracepción. Cuatro años antes que la generación de mujeres que ahora tiene 45 años.

Para evitar embarazos no deseados, la Conselleria de Sanidad empezó el pasado mes de octubre a dispensar de forma gratuita la píldora del día después, algo que dejó de hacerse en el 2009. El fármaco, que debe tomarse en las primeras 48 horas tras el coito, se suministra en los centros de Salud Sexual de la Comunitat o en las oficinas de farmacia. En 2014, cuando aún no era gratis, se vendieron más de 70.000 píldoras poscoitales en la Comunitat. H