La alcaldesa de Castelló, Amparo Marco, destaca que el Ayuntamiento está poniendo todos los recursos humanos y técnicos para ayudar a paliar esta emergencia.

--Cuando se cumplen tres semanas de confinamiento, ¿cómo valora la situación en la ciudad?

--Está demostrando un comportamiento ejemplar. Las denuncias por infracción del real decreto son muy escasas; los vecinos han entendido la importancia de quedarse en casa y cumplir las medidas de protección y seguridad. En cuanto a la gestión municipal, ya veníamos trabajando en la prevención desde mucho antes del estado de alarma, con lo cual la maquinaria a nivel político y administrativo estaba ya en disposición de adoptar las decisiones oportunas para adaptarnos. No se puede hacer un pronóstico certero de cuál será la evolución, pero si seguimos cumpliendo con las medidas adoptadas y siempre contando con la colaboración de la ciudadanía, es posible que logremos frenar la curva y salir de esta. Estoy segura.

--¿Cómo valora la situación sanitaria actual?

--En momentos como este se evidencia aún más la importancia de la sanidad pública, tan vapuleada y menoscabada en épocas pasadas en esta comunidad. La situación es inédita, al menos en la historia reciente, y se dedican todos los esfuerzos y recursos disponibles a resolver esta crisis sanitaria, con medidas como la puesta en marcha de hospitales de campaña. Además, es de destacar la gran labor del personal sanitario para asistir a los enfermos.

--¿Alguna petición dirigida al Consell o Gobierno de España?

--Es momento de arrimar el hombro, de prestar toda la colaboración entre administraciones. Cuando pase esto, será momento de hacer autoevaluación. Vivimos tiempos convulsos, en los que los desastres producidos por el cambio climático y nuevas enfermedades seguirán suponiendo desafíos de orden internacional, y las instituciones públicas deben estar preparadas.

--El Ayuntamiento trabaja en un plan especial de contingencia económica y social.

--Estamos elaborando un plan de respuesta económica y fiscal. Irá en tres direcciones: la fiscalidad, las subvenciones y la dinamización económica. Estamos valorando la reorientación del gasto presupuestario para dotar de recursos suficientes nuevas partidas que reduzcan los efectos económicos del coronavirus; la reducción de inversiones no prioritarias para dotar un plan de ayudas a la reactivación económica y el refuerzo del fondo económico contra la crisis con el gasto no ejecutado en los contratos públicos que puedan sufrir paralización. También la ampliación del catálogo de bonificaciones a los sectores afectados, la agilización de la tramitación del pago a proveedores, de la línea de ayudas autonómicas a las organizaciones festeras por los perjuicios por la suspensión de la Magdalena, y la promoción de nuevas campañas de animación cultural. El plan está en elaboración y se tienen que ir incorporando propuestas y medidas en función de la evolución de la situación.

--¿En qué medida prevé la reorientación de los presupuestos municipales por el covid-19?

--La idea es que los recursos del Ayuntamiento estén a disposición de la resolución de esta crisis. Esta cuestión es prioritaria. Nuestra gestión ha de estar centrada en la gestión de la crisis y en el día después del coronavirus. Las partidas presupuestarias o acciones concretas se irán determinando paulatinamente. Estamos estudiando o bien prorrogar los presupuestos del 2019 o aprobar los de 2020 incorporando el plan de respuesta ante la crisis.

--¿Cómo se está resolviendo la atención a las personas en riesgo de exclusión social?

--La atención a los colectivos más vulnerables ha estado entre nuestras principales preocupaciones desde el primer momento. El Ayuntamiento no ha dejado de trabajar para dar respuesta rápida. Así, hemos habilitado un albergue para personas sin hogar que va a estar abierto mientras dure la crisis y que complementa al municipal. Hemos activado un Servicio de Emergencia Social ante el covid-19 para ampliar los servicios de asistencia domiciliaria a mayores solos para cubrir sus necesidades básicas de higiene o limpieza, también el servicio de Menjar a casa. Hemos incrementado las ayudas de emergencia para pagos de alquiler, electricidad, suministros, etc. En una semana, este servicio ha realizado casi 400 actuaciones y se ha atendido a más de 60 mayores solos o dependientes en sus domicilios. Además, hemos hecho un llamamiento a la ciudadanía para que nos comuniquen si conocen casos de personas mayores solas o en situación de vulnerabilidad que puedan necesitar apoyo a domicilio. No hemos olvidado tampoco a los menores. Desde esta semana estamos repartiendo más de 400 menús diarios a menores en situación de vulnerabilidad y a sus familiares.

--¿Cómo valora la respuesta de los castellonenses?

--Está siendo extraordinaria. La inmensa mayoría ha reaccionado de manera responsable. Además, todos los días nos llegan ofrecimientos de empresas y particulares para ayudar, muestra de la solidaridad en un momento tan duro. La gente sale a los balcones a diario en agradecimiento al personal sanitario y se está generando un sentimiento de comunidad que nos conmueve a todos. Esta crisis está dando la oportunidad de conocer nuestras capacidades y sacando nuestra mejor versión. La gente está dispuesta a ayudar, a arrimar el hombro. Y eso debe ser motivo de orgullo.

--Hablemos del día después. ¿Trabaja el Ayuntamiento en una proyección de los efectos de la crisis y cómo afrontarlos?

--El impacto social y económico de esta crisis sanitaria no se puede mesurar aún. Pero en el Ayuntamiento estamos poniendo todos nuestros recursos humanos y técnicos a trabajar para el día después, planificando posibles actuaciones que mitiguen los efectos de esta emergencia. Habrá mucho que recomponer cuando todo pase, no solo a nivel público, sino también en el sector privado, acuciado ahora por los ERTE. En cualquier caso, Castelló está preparada para afrontar esta crisis y superarla. Nuestro pueblo ha demostrado a lo largo de la historia su capacidad para afrontar desafíos y, esta vez, volveremos a conseguirlo.

--No ha planteado fechas para las fiestas de la Magdalena.

--Sería irresponsable en la tesitura en que nos encontramos en la actualidad. La decisión se tomará contando con todos los colectivos festeros de la ciudad.