La presidenta del PPCV, Isabel Bonig fue directa ayer a la hora de exigir al president Ximo Puig la convocatoria de elecciones anticipadas «ante el espectáculo lamentable de broncas públicas y caos en la gestión de su Consell».

Desde el principal partido de la oposición no dudaron en arremeter contra los socios de gobierno, PSPV y Compromís, en un momento delicado en su relación dentro del Pacte del Botànic, a razón de sus diferencias respecto al apoyo explícito del president a la senda del déficit para las autonomías propuesto por el Gobierno de Pedro Sánchez, cuando previamente se habría pactado con Compromís una abstención, y por el anuncio de la consellera de Justicia, Gabriela Bravo de la ubicación de una comisaría especializada en violencia de género, que exasperó a la vicepresidenta del Consell, Mònica Oltra, como puso de manifiesto públicamente por varias vías y con claridad.

PACTO AGOTADO / Isabel Bonig aseguró que «el Consell está agotado, la comunicación de los socios de gobierno está rota y por tanto creemos que es hora de convocar elecciones», porque desde su punto de vista, los valencianos «no se merecen un Consell que está más pendiente de sus batallas y su espacio electoral que de resolver los problemas que tienen los ciudadanos», aseveró la lideresa popular.

El discurso del PP sobre la debilidad de la coalición se mantendrá vigente, al menos hasta septiembre, como informó Mediterráneo, cuando, con la reanudación de la actividad política tras las vacaciones estivales, se produzca el primer encuentro tras esta crisis entre Puig y Oltra, dado que, pese a que la vicepresidenta manifestó públicamente su interés de aprovechar su visita de hoy al Sexenni de Morella para limar asperezas en un contexto festivo, el president confirmó que no estaba entre sus planes acudir a su localidad «como todos saben», dijo Puig.