La consellera de Justicia, Gabriela Bravo, ha vuelto a reclamar al Ministerio de Justicia la creación de más juzgados para completar la planta judicial de la Comunitat, la cual arrastra todavía un déficit debido a los diez años en los que no se creó ningún órgano más.
Así se lo expresó ayer la titular del área del Consell al nuevo ministro, Juan Carlos Campo, con quien mantuvo una reunión en Madrid. Bravo le explicó que hay partidos judiciales que tienen una gran carga de trabajo o que son estratégicos por ubicarse en ciudades de especial importancia económica o social y que precisan de más órganos.
En este sentido, la consellera destacó la necesidad de crear nuevos juzgados en Castelló --especialmente en la jurisdicción penal--, Dénia, Sagunt, Carlet y Alicante. El pasado verano ya solicitó al Ministerio el quinto juzgado penal para Castelló y otro de instrucción para Vinarós.
Por otra parte, Bravo planteó la «necesidad imperiosa de que se aborde ya la reforma normativa para crear una jurisdicción específica para la violencia de género» de la misma forma que ya existe la de menores en el ordenamiento jurídico. Para la consellera, esta cuestión es urgente porque «no podemos consentir una justicia de dos velocidades y que la desigualdad afecte a las víctimas de malos tratos en función de donde vivan».
Ahora mismo, en la Comunitat Valenciana existen 16 juzgados de Violencia sobre la Mujer (uno de ellos en Castelló y otro en Vila-real que centraliza los casos que llegan de Segorbe y Nules).
La Conselleria reclama que, junto a la jurisdicción específica de violencia machista, se creen además secciones de la Fiscalía especializadas «porque esta será la mejor manera de que podamos trabajar todas las administraciones y coordinar los recursos para una adecuada protección».
En febrero el Consejo General del Poder Judicial acordó pedir la especialización de 33 juzgados de lo penal para el enjuiciamiento y ejecución de asuntos de violencia sobre la mujer. En el caso de Castellón, la propuesta era abordar los casos con carácter exclusivo, pero no excluyente (podrían compatibilizar asuntos).
