Castelló ultima todos los preparativos para que el nuevo servicio de recogida de residuos orgánicos sea a partir de septiembre una realidad. El consistorio avanza en la instalación de 1.098 contenedores marrones que permitan comenzar a ofrecer un servicio pionero a nivel nacional, ganando en sostenibilidad.

La implantación de la recogida selectiva de orgánica, según indican fuentes municipales, conllevará la ampliación de un 20% del personal (está previsto contratar a seis educadores medioambientales, una decena de operarios y los conductores, que cubrirán la servicio en horario nocturno y durante los 365 días del año).

Para ello han adquirido tres nuevos vehículos de carga y otro de limpieza de contenedores, que serán instalados durante el presente mes de agosto, pero permanecerán cerrados hasta septiembre. A partir de entonces, estarán a disposición de bares, restaurantes, colegios, pequeños comercios y la ciudadanía de Castelló en general, para depositar los residuos de materia orgánica.

La puesta en marcha en este servicio, que cumple los plazos previstos pese al impacto de la pandemia del coronavirus en los últimos meses, supone la culminación de un largo proyecto del área de Gestión de Residuos y Reciclaje, que dirige el edil Ignasi Garcia. El proceso ha incluido diferentes experiencias piloto avaladas por la Universitat Jaume I y campañas de concienciación y práctica en los centros educativos de Primaria, con excelentes resultados. Cabe destacar que el nuevo formato de recogida permitirá transformar estos residuos orgánicos (que suponen a día de hoy entre el 40 y 50% de la basura que se deposita en el contenedor común) en otros productos como abonos, y además reducirá la contaminación por filtraciones que producen los vertederos. Asimismo, la concejalía estima un ahorro anual de 300.000 euros respecto a los gastos actuales de tratamiento.

refuerzo / Además, como parte complementaria del proyecto, instalarán otros 150 contenedores de características similares para envases ligeros de plástico, aluminio y acero, y de este modo reforzar ese servicio. Calculan que se duplicará así el volumen previsto en Castelló, hasta un total de 11,7 litros por habitante.

Los hábitos domésticos de muchos castellonenses cambiaron durante el estado de alarma por el coronavirus, y el consiguiente confinamiento en sus casas. Una de las nuevas realidades que (parece) ha llegado para quedarse es el incremento del reciclaje en los hogares, una tendencia que ahora se consolida, según indican los nuevos datos ofrecidos por el Ayuntamiento de Castelló. Abriendo el angular a los seis primeros meses del presente año 2020, se detecta que los residuos con separación en origen crecieron hasta un 14,34%, cifra que se complementa con la caída del 9,01% de los residuos no recuperables. El concejal de Reciclaje y Gestión de Residuos de Castelló, Ignasi Garcia, aboga por favorecer estos nuevos hábitos de los castellonenses. En este sentido, la intención del consistorio de la capital de la Plana es «facilitar todavía más el reciclaje a la ciudadanía», señala el edil. «Esto significa que todos estos residuos pueden ser reciclados y, además de las emisiones que evitamos generar, otro aspecto positivo es la reducción de los desechos que tienen que ser eliminados o enterrados y que pueden resultar contaminantes», añade Garcia.

En esa senda de propiciar el reciclaje en Castelló se enmarca también el inicio previsto en septiembre del nuevo servicio de recogida de residuos orgánicos, y la ampliación del número de contenedores para envases ligeros de plástico y aluminio.

En cuanto a los materiales que ya se separan para reciclar, y por apartados, el incremento más llamativo se registra en Castelló precisamente en los restos de aluminios y plásticos, con un 25% respecto al primer semestre del pasado año 2019. En total se han depositado 890 toneladas en los contenedores de reciclaje. También destaca el vidrio, con un crecimiento del 20%.

En cuanto a papel, el incremento respecto al mismo periodo del año precedente se sitúa en el 5,55%, y es el residuo que más toneladas recicladas acumula (alrededor de 1.400). Por contra, baja el reciclaje de aceite doméstico, un 12,9%, quedándose en las ocho toneladas.