El Ayuntamiento de Castellón prevé construir minidepuradoras o pequeñas fosas sépticas comunes en las zonas que tengan viviendas consolidadas con una cierta densidad y estén en suelo no urbanizable. Unas condiciones que, en la ciudad, se dan en la Marjaleria (sobre todo), en Mestrets y en el área de conexión con Almassora, en la zona de Estepar. El objetivo es «garantizar unos servicios mínimos a estas viviendas que están en suelo no urbanizable, que no serán los mismos que en las zonas urbanas, pero serán suficientes», explicó el edil de Ordenación del Territorio, Rafa Simó.

Este proyecto se materializará a través de la redacción de Planes Especiales de Minimización de Impactos, que deberán ser de iniciativa pública (aunque puede existir un convenio propietarios-Ayuntamiento para su desarrollo y ejecución) y su aprobación definitiva corresponde a la Consellería competente en la materia.

La idea es construir infraestructuras de dimensiones reducidas, acordes a las necesidades de estos núcleos residenciales, dejando de lado obras de más envergadura como grandes colectores para canalizar las aguas residuales, propios de zonas urbanizadas o con expectativas de crecer.

La minimización de impactos que busca esta iniciativa está recogida en el nuevo Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) que se está tramitando y que podría iniciar la exposición pública para el verano. Hoy pasa por la zona de Mestrets y el lunes por Raval-Crèmor, con la que se darán por finalizadas las reuniones participativas en las que los vecinos han podido conocer de primera mano, sobre plano, cuáles son las líneas maestras que planifica el área de urbanismo para su barrio a 20 años vista.

Por las dimensiones de la zona de la Marjaleria, se estima que sea donde más minidepuradoras o pequeñas fosas sépticas se construyan. Con ello se solucionaría uno de los problemas que han venido denunciado en varias ocasiones desde el Grupo para el Estudio y Conservación de los Espacios Naturales (Gecen), que es el vertido de aguas residuales. Al tiempo que se dará respuesta a la demanda de las asociaciones de vecinos de la zona, que reclaman servicios públicos mínimos que respondan a los impuestos que pagan periódicamente a favor de las arcas municipales.

ORDENANZA // Por otra parte, el Ayuntamiento está trabajando en la elaboración de una ordenanza de limpieza de acequias, regueros y solares que también incidirá en la minimización del impacto medioambiental negativo en la ciudad. Poco ha trascendido todavía de la nueva normativa, aunque sí que se sabe que se reducirán los trámites burocráticos para agilizar las tareas.