Los pingüinos han "invadido" la sala de espera del Servicio de Oncología del hospital provincial, y es que desde hace más de quince días estos rudimentarios aparatos de aire, que únicamente mueven el aire pero no lo purifican, sustituyen al sistema de climatización, todo ello en un verano de temperaturas tórridas.

Esta situación no seria más que una nueva anécdota en el despropósito organizativo que nos tiene ya lamentablemente acostumbrados la Dirección del Consorcio, sino fuera por que un sistema de ventilación adecuado, es vital para el bienestar de los pacientes y el desarrollo en condiciones óptimas de salubridad del trabajo de los y las trabajadoras tal y como recoge la normativa de prevención de riesgos laborales pues es una medida de protección en los lugares detrabajo.

La NTP 859, "Ventilación general en hospitales", del INSHT nos recuerda en su introducción que "en los hospitales, la ventilación tiene que cubrir las necesidades clínicas y proporcionar lascondiciones higiénicas adecuadas, con el fin de proteger a los pacientes y a los profesionales (...).

Desde el punto de vista preventivo, la ventilación de los lugares de trabajo es una medida de protección colectiva que permite eliminar o reducir el contenido de agentes contaminantes que puedan estar en el ambiente". Todo ello en pro de evitar contaminaciones cruzadas que afectende forma directa a los pacientes con inmunodeficiencia. Afortunadamente dentro de las consultas el aire acondicionadamente funciona bien, pero desgraciadamente donde más tiempo pasan los pacientes es en la Salas de Espera o en pasillos convertidos en aquellas.

Ante esta situación CCOO, a manifestado su preocupación a la dirección del centro por "los padecimientos estivales de pacientes y trabajadores, que ya que se encuentran sobrecargados por la falta de sustituciones, originada por los recortes", se añade la falta de previsión en elmantenimiento de las instalaciones.

La dejadez de la Dirección de! CHPC y de la Consellería de Sanitat nos está llevando a undeterioro progresivo en las instalaciones, no se trata de un tema puntual, sino crónico que esta teniendo como consecuencia inundaciones que obliga a la parada de los aceleradores, humedades, fallos refrigeración, etc. y ante todo esto, la única medida que ha tomado la dirección del centro a sido, el cierre del Jardín del Hospital.

Una vez más, es la consecuencia de la falta de planificación e inversión real y no de titulares deprensa que poco o nada tienen que ver con la realidad que vive el CHPC, no nos vale la excusade la puesta en marcha de un edificio eterno que nunca llega, mientras tanto, familiares,pacientes y trabajadores siguen sufriendo la desidia de una Dirección irresponsable con nulacapacidad resolutiva de los problemas poniendo parches que alejan cada vez más del hospital idílico que la propia Consellera, Ana Barceló, anuncia a bombo y platillo en la prensa.