La Generalitat valenciana y la Universitat Jaume I (UJI) firmaron ayer un protocolo de intenciones para la financiación y construcción de la segunda fase de la facultad de Ciencias de la Salud. El documento, que tendrá inversiones en los tres próximos años, prevé que las obras hayan acabado en junio del 2021, de forma que la comunidad universitaria podría utilizarlo ya durante el curso académico 2021/22.

Al acto de firma acudieron el president de la Generalitat, Ximo Puig; el conseller de Educación, Vicent Marzà; y la rectora de la UJI, Eva Alcón, quien aseguró que este protocolo «permitirá hacer realidad un sueño». Fue la propia Alcón la que explicó que la segunda parte del proyecto se divide en dos fases. La primera, que costará 3,14 millones de euros, que ya está en periodo de licitación con previsión de iniciar las obras en junio: y una segunda que se adjudicará mientras se construye la anterior y cuyos trabajos arrancarían en abril del 2020 para acabar en junio del 2021.

Para esta segunda fase de Salud, y aunque ya este año el Consell contempla una inversión de 1,6 millones, el grueso de las obras se realizarán en los dos siguientes ejercicios, con un gasto previsto de 9,3 en el 2020 y 5,2 en el 2021. Si se cumplen las previsiones y el gobierno que sale de las próximas elecciones autonómicas mantiene estos compromisos, el edificio se estrenaría para la vuelta a las clases en ese 2021/22.

TRES EMPRESAS // La universidad ya ha dado los primeros pasos en la tramitación del proyecto y, tal y como publicó Mediterráneo, tres empresas optan a acometer los dos edificios, de investigación y docencia, que se sumarán a los tres ya estrenados este mismo curso. Se trata de las castellonenses Becsa y Gimecons Construcciones y Contratas y de la madrileña OHL. En estos dos espacios se ubicarán aulas, laboratorios y despachos departamentales, además de la sala de disección y la osteoteca, que actualmente están en la ampliación de Humanidades.

Puig señaló que el ejecutivo autonómico es «consciente» de la importancia de esta facultad para la universidad de Castellón, y que por este motivo se ha optado durante los últimos años por hacer un «gran esfuerzo» para que este proyecto arranque. El jefe del Consell puso en valor este empeño porque, añadió, el mismo es «mayor» del que supondría el desembolso si la Comunitat Valenciana contara con «un sistema de financiación justo».

Por su parte, el conseller de Educación, Vicent Marzà, añadió que el dinero comprometido «hará realidad una reivindicación de la UJI y de la sociedad de la provincia» que hasta ahora «no se había llevado a cabo, bien por la nefasta gestión anterior o por otras cuestiones». En este sentido, añadió, «el Govern del Botànic demostrará que nuestras palabras no son vacías, sino que lo que decimos es para acabar haciéndolo».

Alcón reivindicó que la facultad, que nació en el 2011 en unas condiciones económicas difíciles, se ha consolidado y cuenta con 1.500 alumnos de grado y 250 de máster. Pese a la falta de profesorado propio, Alcón destacó los buenos resultado que han obtenido los estudiantes de Medicina de la UJI en las pruebas MIR.