Registrar una marca no es especialmente caro, al menos si se pretende proteger la elegida en el mercado nacional, donde las categorías básicas oscilan entre 81 y 147 euros para este año 2020, según informa la Oficina Española de Patentes y Marcas (OEPM).

La marca es lo que diferencia a los productos que distribuye la empresa de los que fabrica o produce la competencia, al margen del nombre comercial y de su razón social. Las empresas suelen optar por registrar su enseña en el registro de la OEPM. Para ello, deben presentar una solicitud debidamente cumplimentada. Debe incluir los datos identificativos del solicitante con su DNI o CIF y si es una persona física o jurídica. Junto a la petición deberá ir un documento que justifique por qué se quiere proteger la marca, la identificación y firma del solicitante, así como una representación de lo que se va a solicitar y una explicación sobre los productos o servicios a los que se aplicará. También hay que especificar si el trámite es para un producto, un servicio, o bien un nombre comercial.