Conscientes de la gravedad del problema y el larguísimo recorrido que ha tenido en la provincia, la Diputación plantea crear un frente común entre las administraciones --los ayuntamientos, el propio Gobierno provincial y la Generalitat-- para trabajar unidos y aunar esfuerzos juntos con el objetivo de acabar de una vez con la plaga de mosquitos. Una mayor implicación que llevan revindicando desde hace tiempo los consistorios, que esperan que esa alianza se traduzca en resultados palpables que permitan poner coto a un problema que nunca parece tener fin.
Con ese propósito, el equipo de gobierno (PSOE-Compromís) que encabeza el socialista José Martí presentó este jueves en la junta de portavoces una declaración institucional, con vistas a ser aprobada en el pleno del próximo martes, que consiga que esa cooperación entre instituciones sea más vigorosa que nunca. El presidente, citando el texto del documento, insta a todas las administraciones a aportar soluciones para entre todos, «de forma conjunta, leal y coordinada», lograr un remedio «efectivo y duradero».
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La Diputación, a falta de que den luz verde a esta enmienda, se compromete también a intensificar los tratamientos e informar a los municipios del plan de trabajo que se vaya realizando, en aras de «organizar, compatibilizar, coordinar y optimizar» esas tareas con el plan anual de cada ayuntamiento.
Por último, Martí insta a dejar a un lado los intereses partidistas en esta lucha y reconoce que es un problema que «se viene reproduciendo en los últimos años» con la llegada de las altas temperaturas, por lo que requiere una acción «conjunta y coordinada».
A tenor de las exigencias de los consistorios, desde la oposición, el PP cree que la gestión de la Diputación «deja mucho que desear» porque ha sido «incapaz» de mitigar el problema y de coordinarse con la Generalitat, a la que acusa de «lavarse las manos».
Así lo reivindica la presidenta del grupo popular en la Diputación, Elena Vicente-Ruiz, que declara que la última gran acción contra los mosquitos la asumieron los populares al frente del Gobierno provincial, cuando pusieron encima de la mesa «un millón de euros», y recordó que su partido ya lanzó el año pasado una declaración institucional que «no ha servido para nada».
Críticas a nivel local
De la misma forma, el PP de Castelló elevará al próximo pleno una moción para impulsar de manera «urgente» un plan coordinado con Diputación y Consell, ya que las plagas «no entienden de términos municipales ni fronteras», remarca su portavoz, Begoña Carrasco. En Vila-real, la popular Gemma Ferreres cree que ambas administraciones «han vuelto a llegar tarde» y exige que «se habiliten todas las partidas necesarias» para luchar contra los mosquitos.
