«Estamos en la cuerda floja». Lo dice desde la Asociación de Profesores Interinos Afectados por el Requisito Lingüístico de la Comunitat su portavoz en Castellón, Enrique Martínez, que reclama a la Conselleria de Educación «seguir impartiendo docencia en puestos docentes de zonas castellanohablantes, con la misma oportunidad que se les da a los profesores funcionarios de carrera con plaza con o sin destino definitivo y a los de Religión, garantizando de esta forma el principio constitucional de igualdad del funcionario público».

Y abogan por «la necesidad de que ampliar más el plazo (han tenido cuatro años desde que se implantó el requisito, en el 2013) para presentar el C1 a los docentes que quedaron afectados por este periodo de transición y cuentan con mayores dificultades para aprender y manejarse en una lengua que no es la suya». Además, piden un plan específico de formación siempre atendiendo a la diversidad territorial.

Con una reclamación ante el Síndic, una campaña en Charge.org y una proposición no de ley al respecto aprobada por unanimidad el pasado día 26 de junio en la Comisión de Educación de Les Corts, piden que «se les tenga en consideración cara a la apertura de vacantes de la próxima semana» y se les permita «volver al puesto de trabajo en zonas de predominio castellanohablante». «No queremos ir al paro por una cuestión lingüística», señaló.