El laboratorio de Iproma, situado en Almassora, es el primero de España en contar con un informe de Responsabilidad Social Corporativa (RSC). Se trata, según la compañía, de un documento que recoge las principales acciones que han puesto en marcha en los últimos meses «para promover el desarrollo sostenible en sus diferentes ámbitos de actuación y promover sinergias con empleados, clientes, proveedores, accionistas y la sociedad».