Candela, Nicolás, Paula, Nayma, Cristina, Gorka, Martina, Avril, Nerea, Cristina, Darius, y muchos más nombres propios, tienen en común que son alumnos del CEIP Blasco Ibáñez de Castelló y que participan de forma activa en una preciosa iniciativa impulsada por el AMPA. El objetivo es implicar día a día a un centenar de estudiantes desde los 2 a los 12 años, además de a sus familiares y a sus profesores.

La vicepresidenta de la asocuación, Sandra Cañaveras, detalla que el propósito «es tratar de normalizar lo máximo una situación que también es anormal, y que incluso puede ser estresante, para los niños». «Ante la incertidumbre y para evitar que estén todo el día delante de la televisión o del móvil, hemos creado una red de retos que los peques deben cumplir cada día para incentivar su imaginación y sus dotes artísticas», destaca.

A través de la página del AMPA del CEIP Blasco Ibáñez en Facebook, más de un centenar de alumnos comparten, prácticamente a diario, mediante foros y vídeos, sus logros y reciben el aplauso y el respaldo tanto de sus compañeros como de sus profesores. «Buscamos hacer comunidad, que sigan en contacto con sus amigos y que no echen de menos a sus maestros con un sistema de retos en los que los estudiantes se sienten implicados y entretenidos», argumentan desde el colectivo.

Entre las pruebas que deben superar los pequeños se encuentran las actividades vinculadas con la cocina, la música, la pintura, la decoración, el maquillaje, el baile o la psicomotricidad.

«El listado de retos va creciendo poco a poco ante la aceptación entre los alumnos y sus familias; lo fundamental es que ningún padre se bloquee ante la situación de cuarentena y nosotros les brindamos la opción de que sumen a nuestras pruebas para que los niños sobrelleven con ilusión cada jornada de reclusión», relata Sandra Cañaveras.