Adif Alta Velocidad ha aprobado la adjudicación de un nuevo contrato para avanzar en el desarrollo del corredor mediterráneo en la Comunitat. Esta actuación comprende el suministro de placas de hormigón sobre las que asentará la vía con tercer carril implantado en Castelló, uno de los pasos previos para la remodelación de la estación. El contrato ha sido adjudicado por un importe de 1.122.704 euros a la empresa Pandrol e incluye la fabricación, transporte y suministro de 10.260 puntos de anclaje de hormigón recubiertos de elastómero que sirve de base para vía dotada de tercer hilo.

Esta adjudicación se añade al contrato formalizado el pasado mes de septiembre, por un importe de 4.900.897 euros y un plazo de realización estimado de seis meses, destinado a obras en la plataforma, superestructura de vía y sistemas de electrificación, para la implantación del ancho estándar en las vías generales y en aquellas otras en las que sea necesario por motivos de circulación. Con estas actuaciones se pretende maximizar el aprovechamiento de las instalaciones existentes y garantizar en todo momento el mantenimiento de unas óptimas condiciones de circulación para la prestación de todos los servicios, tanto para los tráficos de mercancías en ambos anchos como para los servicios de viajeros.

TRAMO CASTELLÓ-TARRAGONA / De forma paralela, el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (Mitma) dio ayer luz verde en el BOE al Estudio informativo para la implantación del ancho estándar en el tramo Castellón-Tarragona, una de las actuaciones previstas dentro del Corredor Mediterráneo, más cerca de hacerse realidad, puesto que ahora ya queda listo para licitarse.

Actualmente el Corredor Mediterráneo ya tiene ancho estándar entre la frontera francesa y Tarragona para pasajeros, aunque no para mercancías, que llegan hasta Castellbisbal. Fuentes del sector explicaron que la previsión es que esa obra —cuyo estudio se ha aprobado— se lleve a cabo cuando se acaben las que se están realizando para completar ese mismo cambio de ancho entre Castellbisbal y Tarragona y entre Castelló y València, todavía con ancho ibérico, en el que por ejemplo hace unos días comenzaron las obras para adaptar la estación ferroviaria de Vila-real.