El Consorcio Hospitalario Provincial de Castelló ha realizado el primer estudio para el diagnóstico del alzhéimer usando el equipo de alta tecnología PET TAC. Como explica Miguel Ángel Santamaría, jefe de área de Servicios Centrales, se trata de un «hito histórico» para Castellón, pues este centro es el único de la provincia donde se puede hacer este estudio para el diagnóstico del alzhéimer y otras demencias. Después de esta primera prueba esperan realizar más.

La diagnosis de esta patología es clínica. Primero, al paciente le ve el médico de familia, quien, ante la sospecha, puede remitirle al neurólogo, que en base a la sintomatología puede llegar a la conclusión de que el paciente podría tener algún tipo de demencia o alzhéimer. Para la confirmación analizan la acumulación de placas de unas proteínas que se denominan Beta Amiloide y Tau. Estas alteran el normal funcionamiento de las neuronas modificando su sinapsis. Al frenar la capacidad de transmisión entre una célula cerebral y otra, la neurona muere, lo que genera los síntomas. El PET TAC constituye la herramienta más importante para el diagnóstico de la afección, ya que tiene una sensibilidad del 91% y una especificidad del 90%. Esto significa que en ese 90% de los casos en los que aún no se han detectado las placas se le califica correctamente.

El alzhéimer es una enfermedad neurodegenerativa que sufren 50 millones de personas en el mundo y que irá a más debido al envejecimiento de la población. Solo en la provincia de Castellón calculan que hay entre 13.000 y 15.000 afectados.

UN RADIOTRAZADOR // La prueba realizada en el Provincial dura entre 20 y 30 minutos. Al paciente le administran un radiotrazador 90 minutos antes de la misma y se queda en una sala aislado (el líquido posee un radio núclido que emite escasa radiación) hasta que se somete al estudio. Este radiotrazador pasa por el cerebro, donde se adhiere a las placas de Beta Amiloide y, según la intensidad del color que surge, se puede detectar en qué partes del órgano cerebral se encuentra. Si están en una cantidad suficiente, el diagnóstico es positivo. Si no, el paciente no padece alzhéimer.

Santamaría explica que en un futuro el PET TAC podría ser muy útil para medir la eficacia del tratamiento y ver si con la medicación no progresan o se reducen las placas de Beta Amiloide.