La alcaldesa de Benicarló, Xaro Miralles, y la concejala de Bienestar Social, Marta Escudero, explicaron ayer las subvenciones contra la pobreza energética. Las ayudas van destinadas a familias que están en riesgo de exclusión social y no disponen de los medios económicos necesarios para hacer frente a suministros de energía eléctrica, gas y agua.

Según los datos que baraja el centro social La Farola, se estima que en la ciudad más de 300 hogares cumplen con las condiciones y más de un centenar, incluso, están ya en situación de exclusión social, con ingresos muy por debajo del mínimo establecido.

Quienes deseen acogerse a las ayudas tienen de plazo hasta el 31 de marzo para presentar las solicitudes y pedir cita previa al teléfono del ayuntamiento. La Concejalía de Bienestar Social emitirá en cada caso un informe y lo enviará por vía telemática a la Conselleria de Vivienda, Obras Públicas y Vertebración del Territorio para su valoración. Si es favorable, remitirá a las empresas que han firmado el convenio con la Generalitat (Endesa, Gas Natural e Iberdrola) la orden de detener el corte de suministro.

Paralelamente, Miralles explicó que se ha habilitado una línea de financiación para el alquiler social, por un máximo de 250 euros cada mes, destinada para las familias desahuciadas. H