La localidad de Almassora y, en especial, la zona costera y la más próxima a la a la desembocadura del Millars, está sufriendo estos días un repunte significativo de mosquitos tigre que, de nuevo, se ha visto reflejado en las redes sociales, con decenas de comentarios sobre las picaduras de estos insectos y sus consecuencias. Un repunte confirmado ayer por el propio diputado provincial de Medio Ambiente, Mario García; y por la concejala del área en Almassora, María José Tormo.

Al respecto, García señaló que el motivo de este incremento en el número de ejemplares --cuyas picaduras se habían limitado hasta ahora a casos muy puntuales-- “a las lluvias de la pasada semana y al incremento de las temperaturas, pero entra dentro de lo esperado”; a la vez que aseveró que el asunto “no es preocupante y esperamos controlar este aumento en las próximas 48 horas”.

Por su parte, la concejala Tormo aseguró a Mediterráneo que el lunes se había procedido a fumigar en aquellas zonas más sensibles, fundamentalmente en el área baja del Millars y en la línea costera, puesto que son las que más sufren el problema”. Y añadió que los trabajos que se vienen realizando en este sentido desde la pasada primavera están en coordinación con los ayuntamientos limítrofes, con el fin de minimizar esta problemática.

ADVERTENCIA // En todo caso, el diputado García advierte que, en el supuesto de que volviera a llover, “podría haber un repunte en las próximas semanas en las zonas de la marjal de Xilxes, Nules y el Prat de Cabanes. Y añadió que, en el caso de Benicàssim, donde también se ha detectado un ligero incremento de mosquitos, “la situación está bastante controlada y continuaremos con los tratamientos el jueves y el viernes”.

A pesar de este último episodio, con un aumento de estos insectos y sus picaduras, García aseguró sentirse satisfecho ante la campaña de este 2016, “que se cerrará en septiembre y que, además, está siendo muy buena comparada con la del año pasado”. H