Las históricas aulas unitarias compuestas por alumnos de distintas edades volverán a partir del curso próximo a algunos municipios de la Comunitat Valenciana. Así lo contemplan las nuevas instrucciones redactadas por la Conselleria de Educación sobre la planificación del año académico 2020-2021 con la intención de crear aulas mixtas que agrupen niños desde los 2 a los 4 años. Se trata de una de las medidas previstas por el Consell en la lucha contra la despoblación en aquellas localidades de interior con centros rurales agrupados (CRA, con 46 en toda la Comunitat Valenciana)?y que por la disminución del número de alumnos corren peligro de cierre. El departamento que dirige Vicent Marzà está analizando los centros en los que podrían implementar esta medida y el presupuesto necesario para su puesta en marcha. Las aulas mixtas que quieren extender a los municipios rurales tendrán un maestro y un educador que ayudará en las labores educativas.

Plan educativo en marcha

Dentro del plan educativo rural que la Conselleria ha puesto en marcha, en este curso 2019-2020 habilitó en la provincia de Castellón ocho aulas nuevas de dos años y cinco pertenecen a aularios de CRA --Barracas, Bejís (Peña Escabia), Catí (Aiguaneu), Forcall (Els Ports), Montanejos y Montán (Palancia-Mijares)--.

La intención de los responsables educativos es mantener las aulas de dos años y crear otras mixtas para favorecer la escolarización desde esa edad y que las familias no tengan que desplazarse a municipios más poblados. El nuevo arreglo o planificación escolar prevé en el borrador -al que ha tenido acceso este diario- concretar las propuestas de nuevas aulas mixtas antes del próximo 31 de enero, para que las familias conozcan con la suficiente antelación las opciones que tienen disponibles en las localidades del interior y puedan planificarse para no abandonar sus hogares.

Contra la despoblación

La Conselleria, dentro del plan contra la despoblación, está estudiando otras iniciativas que frenen el progresivo abandono de las aulas en los ámbitos rurales. Entre estas medidas se están planteando iniciativas que mejoren las condiciones laborales e incentiven las plazas en los centros de los municipios menos despoblados. «Estamos pegándole vueltas a cómo podríamos incluir algún tipo de medida: mayor estabilidad, baremos de concursos de traslados», puntualizan desde Educación.

En esta línea, el departamento que dirige el castellonense Marzà también estudia mejorar la oferta de Formación Profesional en algunos centros para que se erijan en polos de atracción y efecto dinamizador para los alumnos de municipios cercanos, con la idea de consolidar la población en esas zonas y que no mengüen los censos.