El Ayuntamiento de Burriana ha restaurado los 11 cabuts que participan en los actos conmemorativos de la festividad de la Mercé, que tendrán lugar el próximo viernes. Las auténticas batallas que se vienen sucediendo entre los niños y estos personajes con palos de cartón han estropeado las figuras que datan de mediados del siglo pasado y que ya han sufrido varias restauraciones.

Para evitar que sigan degradándose a este ritmo, el consistorio ha decidido prohibir el uso de estos utensilios y de ello se encargarán varios agentes de la Policía Local, que los sustituirán por los típicos aplaudidores utilizados en pabellones y demás recintos cerrados y que son de plástico y aire. La intención es que este año solo los cabuts utilicen los palos.

Varias personas de la Cofradía de la Mercé trasladaron las piezas la última semana del mes de junio para que comenzara un proceso de restauración que se ha llevado a cabo todo el verano y que ha finalizado este mismo mes. En esta actuación se le ha cambiado el color amarillo limón por el verde lima porque se cree que era el color original, “ya que refleja un rostro enfadado y concuerda más con este otro cítrico”, apuntó el restaurador Quique Llobet.

pasacalle // Otra de las novedades respecto a ediciones anteriores es que los cabuts se concentrarán en el Centre Municipal de Cultura la Mercé y, desde allí, arrancará el tradicional pasacalle. El edil de Cultura, Vicent Granel, destacó que esta actuación “era más que necesaria y ya se puede ver que el resultado no puede ser mejor y servirá para seguir disfrutando de la fiesta”.

Por su parte, el edil de Turismo, Santiago Zorío, apuntó que se han adquirido “1.000 de estos aplaudidores”, que repartirán esa misma tarde entre los niños que quieran participar en esta tradición.

Por otra parte, la falla la Mercé se suma a las celebraciones con una cena de pa i porta para este sábado, que se sumará a la procesión de cabuts y gegants. H