El Ayuntamiento de Burriana ha puesto en marcha el plan de asfaltado del 2017. La primera obra de calado ha sido el reparcheo en grandes piezas de más de un kilómetro de la carretera de Nules. Este vial une al casco urbano con la rotonda de la CV-18, en su circunvalación a la localidad.
Se trata de un trazado muy utilizado a diario, no solo por vehículos, sino también por camiones cargados con mercancías de entrada y salida del municipio. El asfalto presentaba numerosos baches, tanto en un sentido como en otro, a lo largo del trayecto entre la rotonda de la avenida del Transport y la circunvalación.
El edil de Vía Pública, Vicent Aparisi, señaló que «era una reinvidación desde hacía más de lustro por parte de los vecinos y nada más hemos podido, lo hemos arreglado». El concejal añadió que «no ha sido un trabajo de poner asfalto en los lugares donde ha saltado, sino que las máquinas han retirado el material en malas condiciones y se puede comprobar que se ha actuado sobre grandes pedazos de eje».
70.000 euros
Esta actuación va ligada a la mejora del camino Marjalet y, entre ambas, supone una inversión cercana a 70.000 euros. Este montante económico, según Aparisi, «es un reflejo perfecto de la política de adecuación de los caminos y vías de la ciudad, ya que, después de acciones como la de Santa Bàrbara o la Serratella, ahora, respondemos a las necesidades de las zonas más alejadas del centro histórico que merecen el mismo tratamiento que el resto de ciudadanía».
Las máquinas se trasladan hoy hasta el camino Marjalet. En este punto, se realizará un reparcheo para adecuar este vial utilizado para usos agrícolas y también como salida de Les Terrasses.
De esta forma, se ofrecerá una alternativa más segura y confortable cuando la pasarela del Clot de la Mare de Déu quede inutilizada. En una primera fase, se actuará desde el litoral hasta la ermita de Sant Gregori. La segunda completará los trabajos hasta llegar al camino La Cossa.
