Recuperar, rehabilitar y poner en uso la Cartuja de Valldecrist de Altura es el objetivo que se ha marcado un equipo multidisciplinar de técnicos en la elaboración del plan director del conjunto monástico, fundado en 1385 por los reyes Martín el Humano y María de Luna, y que llegó a ser el más importante de la orden cartuja y paso a ser un campo de ruinas con la desamortización de Mendizábal. La inversión necesaria para alcanzar los objetivos se calcula en 4,5 millones de euros, a aportar en un espacio temporal de dos décadas, aunque con una revisión intermedia a los cinco años.

Los técnicos han diseñado una actuación «realista, adecuada a los restos existentes y viable económicamente», siempre y cuando se alcance una corresponsabilidad de las administraciones públicas -es propiedad de la Generalitat valenciana y la Diputación Provincial-- y la sociedad.

El instrumento establece los criterios de acción y fija etapas. Así, se proponen usos más intensivos e interactivos en las zonas de la hospedería y la prócura, planteándose espacios de reunión y actividades colectivas en la zona cenobítica que componen las iglesias Mayor y de San Martín como espacio polivalente, quedando la zona eremítica del claustro mayor y las celdas de los padres para actividades más individuales, contemplativas y reflexivas.

PROGRAMACIÓN / La presentación del plan director se inscribe en las jornadas Valldecrist, ámbito de culturas, que se celebran este fin de semana. Entre las actividades programadas para hoy se incluye el concierto de Carpe Diem Chamber Orchestra (a las 19.30 horas); proyecciones audiovisuales, mapping sobre los muros de la hospedería de la Cartuja (a las 22.15 horas) y una observación de estrellas, planetas y constelaciones a cargo de Iván González (a las 22.30). En la jornada de ayer también hubo recorridos por el recinto, degustaciones de productos artesanales de la comarca así como sendos tributos musicales a Víctor Manuel y Ana Belén así como a Mocedades.

Hace unas semanas, el consistorio anunció que había recuperado el escudo procedente del Batán de Valldecrist. Desde el Ayuntamiento explicaron que en agosto del 2003 y con motivo de la construcción de la autovía A-23, la firma Al-Mulk, SL procedió a la retirada de este elemento «como fase previa a su derribo parcial; medida que se adoptó argumentando el riesgo de derrumbe que manifestaba el edificio tras la construcción a escasos metros».

Se depositó en el Museo Arqueológico de Segorbe para garantizar su conservación óptima, así como la proximidad al lugar del hallazgo. Finalmente, factores como la consecución del reconocimiento para la colección museográfica permanente de la Cartuja, permiten « tramitar el traslado de esta pieza a nuestro municipio», explicaron desde el consistorio.