La Diputación de Castellón da por concluidos los trabajos para construir una canalización desde Borriol hasta la depuradora de Castellón, que zanjará de forma definitiva los problemas que han generado durante los últimos años las aguas residuales de la localidad. Ha sido un año de actuaciones sobre el terreno y una inversión de 2,26 millones de euros, cumpliendo así los plazos estimados y culminando una demanda histórica de los borriolenses. El siguiente paso es abrir un periodo de pruebas y comprobar que todo funcione correctamente.

El presidente de la Diputación, José Martí, destacó ayer la importancia de las actuaciones que se han desarrollado en la zona durante un año, «porque se cierra un proyecto que quizás se ha alargado en exceso, pero que nos permite acabar con el problema de contaminación que generaba una depuradora que no daba abasto». En esta línea se pronunció el diputado de Ciclo Integral del Agua, Ignasi Garcia, que tildó de «buena noticia» que «las primeras pruebas se estén realizando sin vertidos ni filtraciones».

Hace algo más de una semana ya se procedió a desviar el agua residual que entraba a la depuradora de la localidad hasta el colector, lo que ha permitido contemplar que no hay ninguna incidencia relevante. Con ello, según señalan los equipos técnicos, se ha comprobado que no hay ningún vertido, algo que sí se producía con la actual depuradora.

demolición // Así, si se cumplen las previsiones, en los próximos días se procederá a iniciar las tareas de vaciado del reactor y decantador, así como la desinstalación de equipos y transporte del material almacenado en la EDAR de Borriol. Todo concluirá con la demolición definitiva de las instalaciones, que liberarán así una superficie para la localidad. La depuradora de Borriol no era capaz de tratar todas las aguas que genera el municipio, de ahí que se canalicen hasta Castellón para un tratamiento conjunto.