Quedan cuatro días para que se haga efectivo el abandono de las instalaciones deportivas de Vallpala por parte de la empresa adjudicataria, en cumplimiento de la rescisión del contrato que fue aprobada en el pleno del Ayuntamiento de la Vall d’Uixó, como final a varios meses de litigio administrativo, tras detectar la ejecución de unas obras de reforma para habilitar un restaurante en esta propiedad municipal sin solicitar licencia.

Ante la inquietud que esta situación pueda estar generando entre los usuarios habituales del complejo --que no solo incluye pistas de pádel, sino también un pequeño campo de fútbol que se utiliza para realizar entrenamientos--, el equipo de gobierno ha insistido en que el cierre solo afectará al restaurante y no al resto de instalaciones que, hasta que se resuelva el caso de manera definitiva para facilitar una nueva adjudicación, permanecerá en funcionamiento con gestión pública directa.

Solo se verá alterada la programación de actividades impulsadas por la empresa a partir de ese día, de hecho, como avanzó Mediterráneo, el Ayuntamiento emplazó a su suspensión, pero los entrenamientos y demás usos deportivos, estarán garantizados. A partir de mañana, clarificarán el procedimiento a seguir.