El pleno del Ayuntamiento de la Vall d’Uixó aprobó ayer la apertura de un nuevo expediente sancionador a la empresa encargada de la gestión de los servicios de recogida de residuos y limpieza viaria, en el que se «refundirán» los procedimientos abiertos hasta el momento, como anunció antes del pleno el concejal de Medio Ambiente, Fernando Darós.

Aunque la principal novedad no es la reunificación de los expedientes en uno nuevo, sino el hecho de que el consistorio ha decidido reclamar a la concesionaria un total de 900.000 euros, que se corresponderían con las cantidades que «el Ayuntamiento pagó de más por servicios que no se estaban prestando», según explicaron los portavoces del tripartito: la alcaldesa Tania Baños (PSOE) y los tenientes de alcalde Antoni Llorente (EUPV) y Fernando Darós (Compromís).

La necesidad de abrir este nuevo procedimiento tiene que ver con la resolución de los anteriores, en los que el consistorio perdió los juicios que inició la empresa ante el impago de facturas, que el Ayuntamiento justificaba en los incumplimientos del contrato. «La jueza no nos quitó la razón, nos dijo que no habíamos utilizado el procedimiento adecuado», puntualizaron.

Eso es lo que se pretende hacer a partir de ahora, evidenciar que, «según los informes técnicos», la empresa no cumplió partes fundamentales del contrato y, por lo tanto, «tiene que devolver el dinero que se le pagó de más».