El grupo municipal socialista en el Ayuntamiento de Vall d’Alba continuará ejerciendo su labor de oposición en el consistorio, pese a la fuga de afiliados del PSPV-PSOE en la localidad, tras el enfrentamiento con la ejecutiva provincial que lidera Ernest Blanch, que ha acabado con la dimisión del hasta ahora lider del partido a nivel local, Fernando Grande, tanto en su condición de militante como de concejal.

La peculiaridad del grupo municipal estriba en que los tres ediles no están afiliados al partido, por cuanto entraron en la candidatura socialista para las pasadas elecciones municipales como independientes. Y es que, Grande explicó ayer a Mediterráneo que le sustituirá como concejal Santiago Saura, quien acompañará a Estela Capdevila y Manolo Vallés, que ya accedieron al consistorio tras los comicios de mayo.

«Nosotros hemos querido y sabido separar los aspectos relativos a la organización del partido de lo institucional, con el objetivo de seguir trabajando por el pueblo», aseveró Grande, quien adelantó que, en estos momentos, «estamos cerrando la contabilidad de este año para, una vez pasadas las fiestas de Navidad, formalizar mi dimisión y la de la secretaria de organización, Susana Andrés». Una dimisión que dejará con solo dos afiliados al partido en Vall d’Alba.

Al respecto, Grande indica que con esta cifra el PSPV-PSOE en este municipio está abocado a disolverse, «ya que se requiere un mínimo de cinco integrantes para formalizar una gestora».

El hasta ahora portavoz socialista en el Ayuntamiento reiteró que la decisión de abandonar la formación y su acta de edil ha sido la consecuencia del «desamparo» de la ejecutiva provincial del PSPV, desde donde afirma que no ha sentido el apoyo de la dirección --con Blanch ahora al frente-- en los pleitos judiciales contra el que fuera número dos de Carlos Fabra en la Diputación, Francisco Martínez. Unos pleitos por los que, asevera, «en la actualidad se me están cerrando muchas puertas para encontrar trabajo».