División de opiniones entre los municipios turísticos a la decisión del Consell de permitir contratar durante dos años policías interinos. Las dudas surgen en localidades gobernadas por el PP, como Peñíscola y Benicàssim, mientras municipios con alcaldes socialistas, Orpesa y Benicarló, aplauden esta iniciativa.

Con la controvertida aprobación de la ley de coordinación de policías locales, en el 2017, la Generalitat se propuso acabar con la figura de los agentes interinos. Dos años después, una sentencia del Tribunal Constitucional, que avala la contratación de policías locales en régimen de interinidad ha obligado al Gobierno autonómico a recular, a través de una enmienda introducida en la normativa de acompañamiento a los presupuestos del 2020.

La modificación, que parte de la Conselleria de Justicia, pretende regular un marco legal ordenado y común para encauzar el uso de los interinos por parte de los ayuntamientos, con una serie de condiciones frente a los abusos. Establece que podrán utilizar este método «excepcionalmente», cuando «concurran motivos de urgencia y necesidad». La contratación no superará los dos años.

VIGENCIA // Dichas plazas deberán estar incluidas en una oferta de empleo público que sea vigente con anterioridad a su cobertura temporal. Al respecto, varios sindicatos se oponen a la contratación de interinos, ya que ven un freno a la profesionalización.

Además, las quejas de los municipios por las dificultades para funcionar sin interinos ya obligó al ejecutivo del Botànic a aprobar una moratoria que prorrogaba hasta diciembre de este año la adecuación de las plantillas a la nueva normativa del 2017. Ese inminente vencimiento es el que argumenta la Conselleria para corregir la norma, con el objetivo de evitar un escenario de caos.

En el caso de la provincia, Benicarló, Orpesa, Peñíscola y Benicàssim son algunas de las localidades que, por su condición turística, fueron las más perjudicadas durante el pasado verano, tal como informó Mediterráneo.

REACCIONES // La alcaldesa benicarlanda, Xaro Miralles (PSPV), explica: «Tenemos abierto un proceso para cubrir 13 plazas de policía fijas, cuatro agentes de movilidad y nueve en el turno libre, de manera que nosotros sí estamos cumpliendo con los requisitos en el caso de que en verano necesitemos estas contrataciones. Creo que esta ley permite a las poblaciones turísticas cubrir las necesidades de seguridad, pero pensando que los trabajadores deben estar cualificados».

Por su parte, la munícipe de Orpesa, la también socialista María Jiménez, valora de forma positiva la acción del Consell, «para dar la opción de contratar policías en los lugares que de manera temporal, a lo largo del año, tienen características especiales por la llegada masiva de turistas».

Las dudas surgen en ayuntamientos con ejecutivos del PP. La primera edila de Benicàssim, Susana Marqués, sostiene que «quieren paliar a toda prisa el empastre que hicieron al aprobar una ley sin contar con todos los beneplácitos. Amplían la posibilidad de contratar, pero continúan sin resolver el problema del verano o, de momento, no se ve reflejado».

Andrés Martínez, desde Peñíscola, recuerda que la imposibilidad de emplear interinos la pasada campaña estival supuso «pagar una bolsa de horas extra de más de 90.000 euros» y fue «caótico». «Para el 2020 ya se ha presupuestado la convocatoria de plazas porque queremos que la plantilla crezca para todo el año».