Moncofa celebró ayer un multitudinario pasacalle con motivo de Sant Antoni, que arrancó desde las inmediaciones del colegio Científic Avel·lí Corma. La Asociación de Tambores y Bombos del Santísimo Cristo de la Agonía estuvo al frente del desfile y puso el toque musical. Tras honrar al santo, los participantes se dirigieron hasta la plaza de la Iglesia para proceder a la bendición de los animales, y la recién creada asociación Gats sense sostre hizo entrega de un regalo a los perros.

Como viene siendo habitual, las caballerías fueron las primeras en recibir el agua bendita de manos del párroco, Jesús Vilar. Seguidamente, fue el turno de los que portaron su animal o los típicos rollets o caramelos.

La torrà popular, organizada por la comisión de peñas de las fiestas de octubre --que dotó las inmediaciones con mesas y sillas para los comensales--, congregó a cerca de 200 vecinos. Además, desde el área de Fiestas del Ayuntamiento prepararon varias hogueras que fueron encendieron para que vecinos y visitantes pudiesen asar su carne y embutidos. El alcalde, Wenceslao Alós, manifestó que desde el consistorio siempre están dispuestos «a colaborar en estos actos», subrayó, y agradeció la implicación de la comisión de fiestas.

Tras una cena en buena compañía, la velada dio paso al baile con una discomóvil que calentó el ambiente en una cita en la que el frío fue el invitado añadido.