La parálisis política se ha instalado en el pleno del Ayuntamiento de Nules y no hay sesión que no acabe con acuerdos de calado que no prosperan al ser rechazados por la oposición. El más hiriente, por sus implicaciones, es el que tiene que ver con los más de 500.000 euros de facturas a proveedores impagadas correspondientes al primer trimestre del 2019. Una vez más, la propuesta de firma de un préstamo para liquidar este pendiente fue bloqueada por el PSOE y el Partido Popular.

Sobre el posicionamiento de los segundos, el alcalde, David García, asegura que «no hay nada que reprocharles, porque mantienen una postura coherente desde el principio». Pero cuando se trata de hablar de los socialistas, la crítica se endurece. Emplea términos como «penoso» y les acusa de no tener «sentido de la responsabilidad», porque formaban parte del equipo de gobierno cuando se contrataron esos servicios que ahora se adeudan y porque «el 60% corresponden a las concejalías que ellos gestionaban».

CRUCE DE SANCIONES / El portavoz socialista, Adrián Sorribes, también recurre a la descalificación de quien fuera su socio de gobierno al insistir en que «miente» de forma constante y «oculta de manera persistente la información», apuntando a que «evidencia que toma decisiones a un mes vista y no tiene ningún proyecto de legislatura», de ahí su reincidente falta de apoyo. Tras el pleno, defendió que CeN propone la firma de un préstamo «sin que existan garantías de que se pueda pagar» y justificó que condicionaron su apoyo «a un plan de viabilidad» que no les han proporcionado.

Y eso, a pesar de que, según el munícipe, les «pidieron que se liquidara el préstamo con los remanentes de tesorería» y atendieron «su solicitud. Aun así han votado en contra». Frente a ellos, en el PP insisten en que llevan «años anunciando este desenlace». Y, mientras tanto, seguirán sin cobrar entrado ya en el 2020.