La urbanización del polígono hortofrutícola de la Senda Mitjana de Nules, en manos de una agrupación de propietarios, empieza a ver la luz al final del túnel después de dos décadas de retrasos y bloqueos que empezaron a producirse en el 2016, tras un cambio en la junta directiva.

El alcalde, David García, confirmó ayer que el departamento de Tesorería del Ayuntamiento está trabajando en la tramitación del cobro por la vía de apremio de las cuotas impagadas --se gestionarán a través del servicio de recaudación de la Diputación de Castellón--, principal lastre para el desarrollo del proyecto. No en vano, quienes no asumieron sus compromisos son, precisamente, quienes concentran la mayor superficie afectada por el PAI.

PAGO O EXPROPIACIÓN / La cantidad pendiente podría superar de largo los 500.000 euros, un dinero que, según fuentes de la agrupación de propietarios, podría facilitar la conclusión de unas obras que llevan paralizadas tanto tiempo que no son pocos los que temen que la mayor parte de servicios que en su día instalaron se hayan deteriorado tanto que tengan que sustituirlos, con el gasto que ello comportaría.

Para este avance fue determinante el registro de la reparcelación definitiva, un trámite que había provocado muchos problemas, motivados, entre otras razones, por el paso del tiempo y el cambio de las condiciones de propiedad de los terrenos (herencias, compraventas). Pero el impulso de la nueva directiva posibilitó que, en septiembre del año pasado, el documento definitivo pasara por el Registro de la Propiedad y comenzaran «los trámites extrajudiciales previos para iniciar la vía de cobro en apremio a los asociados que adeudan cuotas pendientes», como precisó el asesor legal de la agrupación.

Las expectativas «son buenas» en cuanto a la solución de este paso, por lo que la actual espera es bien distinta de la que pesaba sobre quienes sí que acudían a sus obligaciones y pagaban las cuotas que se han ido estableciendo durante este tiempo.

La urbanización definitiva del conocido como PAI de la Senda Mitjana, permitirá la ampliación de los terrenos disponibles en el polígono hortofrutícola --donde entre otras se encuentran la cooperativa Nulexport o la Cooperativa Agrícola San José--, lo que permitirá poner suelo industrial a disposición de los empresarios interesados. Esta es un área del sector terciario, por lo que las actividades a implantar deben estar vinculadas con los servicios o la agricultura, una posibilidad que hasta ahora no existía.