Las obras en la calle Boqueras de Almassora «mejorarán la seguridad vial de los peatones» en la zona, entre ellos, los alumnos del IES Falomir y el colegio Errando Vilar. El Ayuntamiento informa de que los estudiantes que caminan por esa parte de la vía, sin acera, hasta los accesos a ambos centros educativos ganarán en protección «porque arrancarán los matorrales y se creará una acera de 1,20 metros para reordenar el caos urbanístico en ese lado, pues hay viviendas unifamiliares que sobresalen respecto de la carretera», puntualizan.

El arquitecto municipal y la alcaldesa, Merche Galí, se reunieron ayer para consensuar los últimos detalles de la intervención y atender las demandas de los vecinos, que en la mayoría de los casos están recogidas en el proyecto que finalizará este mes.

Precisamente, la creación del carril bici ha desatado numerosas quejas en las redes sociales por parte de los vecinos de la zona. Entre ellas, de la AAVV Barri Botànic, que denuncian que esta ruta y los coches aparcados a continuación de la calle dificultan la visibilidad al salir del estacionamiento de Boqueras 101, donde apenas se ve nada, debiendo invadir y parar en ese carril y ocupar parte del de circulación para poder incorporarse al tráfico, con el riesgo que conlleva. También muestran su malestar por el hecho de que la parada del autobús está en el mismo eje y los pasajeros bajan y suben por donde van las bicicletas, con el consiguiente peligro que implica.

Además, lamentan poco espacio para los contenedores de basura, que complica la recogida.

En este sentido, fuentes municipales informan de que las obras no han terminado y que estos recipientes se reubicarán en nuevos espacios más idóneos y pintarán el suelo en esos emplazamientos, mientras que la parada de autobús se desplazará unos metros para aumentar la seguridad de los usuarios. Esa acera se ampliará ganando espacio a la carretera con el objetivo de que la creación de carril bici no reste amplitud a los transeúntes.

campaña informativa // Sobre el riesgo de seguridad de los ciclistas, apuntan que la situación es la misma que en el resto de ejes urbanos. «En San Jaime, donde la disposición del carril es idéntica, cada vez son más los que lo usan». El consistorio se compromete a hacer una campaña informativa «para causar las mínimas molestias y ayudar al vecindario a acostumbrarse a la nueva disposición, determinante para reducir la velocidad del vial».