Las inclemencias meteorológicas no impidieron que ayer los devotos de Sant Antoni en Peñíscola honrasen al patrón de los animales, pues optaron por no suspender los actos programados. Ni la lluvia ni el temporal fueron óbice para que los fieles asistieran a la misa que se celebró en la parroquia de Santa María y que abrió los actos de la jornada festiva.

La ceremonia contó con la presencia de la reina de las fiestas (Leticia Gaseni), acompañada de su corte de honor, las autoridades locales, el mayoral 2020 (Vicent Bayarri) y todos los miembros de la comisión de Sant Antoni. Durante la eucaristía los mayorales realizaron la tradicional ofrenda al santo patrón, momento que incluyó productos de la tierra, los típicos rotllets y un pan de grandes dimensiones. Al finalizar el oficio religioso, y en el mismo templo, procedieron a la rifa de la cesta, un jamón, el porquet y el cavallet.

A continuación, la Asociación de Sant Antoni celebró una comida de hermandad en un conocido restaurante de la localidad.

Los únicos actos que tuvieron que suspender por el mal tiempo fueron la concentración y el pasacalle de las caballerías por el casco antiguo del municipio.

Con los actos desarrollados ayer, Peñíscola clausuró la agenda de actividades vinculada con la festividad de Sant Antoni, que arrancó el pasado día 11 con la baixada de l’arbre. Durante los dos últimos fines de semana, la localidad ha dedicado varias citas al patrón de los animales.