El jefe del Consell llegó al Ayuntamiento tras subir a pie las rampas de las murallas renacentistas y cruzar el Portal Fosc. Firmó en el libro de honor, con un escrito sobre la «condición de ciudad de referencia, tanto a nivel turístico como cultural, con peso histórico y un gran futuro».

Concluido el momento protocolario se inició una reunión, en la que los dirigentes locales expusieron las reivindicaciones referidas a competencias autonómicas. Entre ellas, la mejora de seguridad en la carretera CV-141. El alcalde dijo que se ha recibido «un requerimiento para la disposición de los terrenos, lo que supone que el tema avanza».

Por otro lado, se solicitó un acuerdo para la mejora y aprovechamiento del puerto, sobre el que Andrés Martínez expresó tener «una buena predisposición». El listado de peticiones también incluyó un Centro de Desarrollo Turístico, reforzar la programación del Palau de Congressos o ampliar el pabellón polideportivo y el colegio Jaime Sanz. Puig comentó la voluntad de «buscar las alianzas necesarias para mejorar la vida de los ciudadanos, que para eso están las instituciones».