La celebración de la jornada conocida como Sant Sebastianet (llamada así popularmente porque el tamaño de la imagen del patrón de Vinaròs es inferior a la que hay en la ermita) puso ayer el punto final a los actos dedicados a venerar a Sant Sebastià.

Una celebración que coincide siempre con el domingo siguiente al día 20 de enero. En esta ocasión fue una semana más tarde, al haber caído en domingo la jornada de la señalada fecha. En la eucaristía participó el coro de la coral García Julbe dirigida por Rossend Aymí, con Enric Meliá de instrumentista al órgano.

BENDICIÓN / Posteriormente, tuvo lugar el ritual de la bendición del mar, con lo que la reliquia del santo fue portada hasta la orilla de la playa del Fortí, para recordar que fue a través del Mediterráneo como llegó esta figura hasta la localidad. Las palabras dedicadas al patrón se leyeron frente a la costa, con protagonismo destacado de los más pequeños. La procesión se realizó con la imagen del Sant Sebastianet portada a hombros por los costaleros de la cofradía del Paso de San Pedro y estuvo acompañada, como es habitual, por la banda de la sociedad musical La Alianza, dirigida por José Ramón Renovell.

La convocatoria festiva finalizó con los cantos del himno en la iglesia arciprestal, el templo donde se celebró la misa mayor y donde, al llegar, se procedieron a venerar la reliquia del santo.