El president de la Generalitat en funciones y secretario general del PSPV-PSOE, Ximo Puig, afirmó ayer que, si hay «buena voluntad» en Ciudadanos (Cs), los socialistas están dispuestos a actuar «con la máxima generosidad» para que en la ciudad de Alicante haya un gobierno «a la europea».

«No queremos que la extrema derecha condicione el Gobierno de la ciudad de Alicante», indicó Puig, en referencia al futuro gobierno alicantino, después de que en las elecciones del domingo PP y PSOE lograran 9 concejales cada uno, Cs 5, Podem-EU 2, Compromís 2 y Vox 2, por lo que Cs podría decidir el color del Ayuntamiento. Puig se mostró partidario de un Gobierno local en Alicante sin la extrema derecha, «como haría Macron o como haría Merkel», y destacó que el PP «se ha abrazado permanentemente a la extrema derecha», por lo que si Cs se quiere separar de esa «opción seguidista de la extrema derecha» existe «otra opción».

La opción es «hablar con el PSOE e intentar conseguir que no condicione el futuro de Alicante la extrema derecha», añadió Puig, quien a la pregunta de si eso sería a cambio de que la alcaldía fuera para Ciudadanos contestó que están dispuestos a «la máxima generosidad».

SIN LA EXTREMA DERECHA // El president puntualizó que ese posible pacto entre socialistas y Ciudadanos se referiría también a la Diputación de Alicante, porque «es muy importante que la extrema derecha no condicione ningún ayuntamiento ni ninguna institución». «La realidad política de la provincia de Alicante permite un gobierno a la europea, es decir, un gobierno sin que la extrema derecha esté en ese gobierno» ni lo condicione, insistió Puig, quien añadió que eso se puede conseguir a través de un acuerdo «de las fuerzas progresistas con Ciudadanos», puntualizó.

Y señaló que los socialistas van a «trabajar en esa dirección», que está todavía en un «momento inicial», y que de forma «clara, con total transparencia y con total legitimidad» le piden a Cs que no «permita» ni «consienta» que la extrema derecha «condicione el Ayuntamiento de Alicante».

Asimismo, Puig incidió en que la postura de Cs de evitar vetar al PSOE en los pactos poselectorales es «una posición razonable», pues, dijo, «hay que intentar romper la política de bloques» y «buscar soluciones transversales».