La Conselleria de Sanidad reorganizará los flujos de pacientes oncológicos y optimizará y garantizará la calidad asistencial en el caso de que el Instituto Valenciano de Oncología (IVO) decida, finalmente, renunciar a la firma del acuerdo de acción concertada para la atención oncológica. Por tanto, no sacaría a concurso el servicio oncológico. Así lo aseguró ayer la consellera de Sanidad, Carmen Montón, tras reunirse con los gerentes y los jefes del servicio de Oncología de los Departamentos de Salud de València para marcar «la hoja de ruta» después de que el IVO haya solicitado una prórroga para seguir trabajando en el acuerdo de la convocatoria.

Carmen Montón explicó que ayer llegó a la Dirección General esa petición de prórroga y Sanidad está estudiando «la manera de concederla», aunque aseguró que el aplazamiento es para poder sustanciar la información necesaria y cerrar el contrato y «no está sujeto a ningún tipo de negociación, esto en la administración no cabe, no es legal».

«encruzijada» // A su juicio, el IVO está en una «encrucijada» y debe tomar una decisión, «o bien seguir manteniendo esa alma asistencial histórico-social de servicio público a los valencianos de entidad sin ánimo de lucro o tener un alma más empresarial». «Es una decisión legítima que vamos a respetar», señaló Montón, quien agregó que si el IVO decide salir de la colaboración con la Generalitat «estamos preparados».

Respecto a los 40 millones que Sanidad adeuda al IVO, Montón explicó que, al estar esa cantidad fuera del contrato, el abono es «mucho más lento administrativa y burocráticamente». Además, pidió a la entidad que no busquen «excusas falsas» para dejar de colaborar con la Administración, en referencia al informe de la abogacía que veía irregular el concurso de Sanidad.