Dos testarazos de Karim Benzema, en el papel de 9 que tanto se le demandó desde su llegada al Real Madrid, propiciaron la remontada del equipo blanco ante el Eibar (2-1) en una tarde desapacible en el Bernabéu, con dos caras del conjunto de Zidane, dominado y silbado en el primer acto antes de rescatar el orgullo.

El Eibar maduró el partido, avisó castigando fallos de Varane en la salida del balón, cuando Cucurella centró y Enrich no llegó por milímetros, y sin sentir peligro acabó golpeando en su único disparo a la portería de Keylor Navas. Había hecho una mala salida por alto el costarricense que salvó Reguilón, en su primera aparición con Zidane. Y fue superado a seis minutos del descanso, lanzándose al césped ante el control de Cardona, que marcó a placer.

Tras el descanso el Eibar se encontró con el jarro de agua fría de la lesión de Ramis, que hizo improvisar a Mendilibar a los 53 minutos. Con el paso de los minutos el Madrid fue encerrando a su rival. Poco después llegó el empate del Real Madrid, con un cabezazo de Karim Benzema.

En la recta final marcó de nuevo Benzema, con otro testarazo tras una acción de estrategia en un saque de esquina y pase con guante de seda de Kroos. Tuvo el triplete en su bota derecha el francés, con el Eibar ya volcado buscando un tanto que premiase su esfuerzo, pero el meta visitante Dmitrovic le ganó de forma providencial en un cara a cara.H