El Villarreal quiere más músculo para fortalecer un equipo al que la inesperada derrota ante el Celta ha dejado en la UCI: sobrepasado con creces el primer tercio de la Liga, muy lejos de los objetivos marcados al inicio de la temporada —a ocho puntos de la zona europea— y condenado a mirar inevitablemente hacia abajo, donde la zona de descenso amenaza desde prácticamente el estreno de la competición. En ese estado, la entidad amarilla ya dirige su objetivo hacia un mercado de invierno donde espera encontrar las piezas que provoquen un cambio de dinámica y refuercen las zonas en las que el Submarino ha notado una bajada de rendimiento en esta segunda campaña de Javier Calleja al mando de la nave.
El objetivo principal sigue siendo un centro del campo donde Cáseres se ha quedado demasiado solo, con Trigueros intentando recuperar el nivel de las últimas campañas, con la amenaza de otro año en blanco para el capitán Bruno, el hándicap de la larga convalecencia de un Javi Fuego que apenas está dando los primeros pasos para poder consolidarse de nuevo como opción y el resultado negativo de la apuesta de urgencia por Iturra, prácticamente inadvertido desde su llegada al club a primeros de septiembre.
En esa parcela, el Villarreal insiste por el valenciano Vicente Iborra. Como ya apuntó Mediterráneo hace varias semanas, el mediocentro del Leicester City es la pieza que tanto el club como el cuerpo técnico consideran clave para dar estabilidad al centro del campo. El futbolista estaría abierto a un traspaso para volver a sentirse protagonista en la élite, después de que en la presente campaña Iborra solo sea un recurso para Claude Puel, técnico del conjunto inglés, que solo ha otorgado la titularidad al exsevillista en la Copa de la Liga --en la Premier apenas alcanza una media de 28 minutos por partido. El Villarreal podría plantear al Leicester una cesión con opción de compra para ganar físico, control en la medular y, también, mayor llegada desde la segunda línea.
LA 'VÍA ROMANA', MARCANO Y PEROTTI
El conocimiento de la Liga española de Iborra es otro de los puntos fuertes que ve el Villarreal en el centrocampista a la hora de plantearse su contratación, aspecto que también podría tener en cuenta para acabr de perfilar los cambios que se avecinan a partir de enero. La entidad que preside Fernando Roig también tiene en cuenta un par de posiciones a mejorar en la actual plantilla de Calleja. El centro de la defensa y un hombre que aporte variantes en las posiciones de banda en la medular (actualmente solo con el ascendido Chukwueze con poder de desequilibrio) son otros retos que se presentan en el mercado.
En Italia dan por hecho que dos futbolistas con experiencia en el fútbol español, el central Iván Marcano y el centrocampista Diego Perotti, abandonarán la Roma en la apertura del próximo plazo de fichajes y que el Villarreal se presenta como uno de los posibles destinos para algunos de ellos... o para los dos.
El defensa cántabro ha crecido enormemente desde que tuviera que abandonar el Submarino hace ya casi nueve años, tras el cese de Valverde y la llegada de Garrido al banquillo groguet. En Getafe, Olympiacos, Rubin Kazán --en menor medida-- y sobre todo Oporto --titular en las cuatro últimas campañas-- demostró su capacidad para ganarse un sonoro fichaje por la Roma el pasado verano, aunque en el Calcio el central de 31 años no ha acabado de encajar. El Sevilla e, incluso, el Atlético también han sonado como posibles destinos en el que sería su regreso a España tras siete años de trotamundos. La situación del argentino Perotti en la Roma es aún peor: solo tres partidos entre Seria A y la Champions.
