El Real Madrid se impuso (1-3) al Levante en el estadio Ciutat de València en un partido sin alardes y con poco fútbol del equipo del equipo de Zinedine Zidane ante el colista de la categoría, que a pesar de su inferioridad técnica nunca entregó el partido.

Los dos primeros goles madridistas llegaron en una primera parte insulsa del conjunto blanco gracias a un penalti y a un gol en propia meta del portero local, con la intervención de Borja Mayoral, si bien fue en la segunda parte cuando el Madrid mostró su mejor cara aunque sin poder rematar el marcador.

El Levante inició el partido con una fuerte presión sobre el Real Madrid que le llevó a tener dos buenas ocasiones de gol en los primeros minutos en las botas de Rossi, especialmente la primera, que obligó a Keylor Navas a realizar una gran intervención para atajar el balón en dos tiempos.

La presión le duró poco al Levante, si bien el Real Madrid se mostraba espeso en su juego y sin inquietar la portería de Mariño, que veía como los acercamientos del equipo de Zidane eran controlados por su defensa.

MEJORÍA BLANCA // Poco a poco el Madrid se fue imponiendo en el centro del campo, pero sin llegar a asediar la meta local, hasta que el partido se volvió loco con tres goles en cinco minutos. Los blancos se pusieron 0-2, pero Deyverson recortó distancias.

Volvió a salir fuerte el Levante en la reanudación, pero no tardó el Madrid a sacudirse la presión. James, Nacho y Mayoral pusieron en aprietos a Mariño pero no tuvieron suerte ante la portería rival, aunque no fue hasta el descuento cuando marcó Isco. H