Lejos de los culebrones del verano, de lo que pase con Neymar, de los millones y millones que gastan los Real Madrid, Barcelona y Atlético..., el Granada arrancará la temporada con el honorífico título de campeón… de la pretemporada. El conjunto nazarí, de regreso a Primera, ha firmado el verano perfecto desde el punto de vista de los resultados: siete partidos, siete victorias (lo que se traduciría en 21 puntos), con solo dos goles en contra. Solo el Sevilla le superaría en una hipotética clasificación con 22, pero ha disputado dos encuentros más y perdió uno, precisamente el más reciente… contra el Granada.

El conjunto dirigido por Diego Martínez se ha caracterizado por su solidez defensiva (solo dos goles en contra), pero también los ha exprimido (11 a favor), frente a rivales de su misma entidad (Valladolid y Sevilla), de segunda división (Alcorcón, Almería y Las Palmas, así como el Reading inglés) y uno de Tercera (Jaén).

El Granada, tras dos años en Segunda A, tiene el objetivo de salvarse con el menor sufrimiento posible. No obstante, tendrá el menor presupuesto de la categoría, ya que afronta una sanción impuesta por LaLiga, por incumplimiento del control económico la pasada campaña, que le ha restado 4,24 millones de euros de su límite salarial. El castigo llegó después de que el delantero colombiano Adrián Ramos, que sigue, denunciara el adeudo de una serie de cantidades y gratificaciones por parte del presidente y máximo accionista del Granada, el chino John Jiang, a través de pagadores ajenos al club. A la postre, han logrado aumentar ese límite salarial, multa aparte, en unos 10 millones.

EL DÉFICIT FINANCIERO // Los nazarís tratarán de compensar esta merma financiera haciendo valer el bloque y los valores que le impulsaron al ascenso directo la pasada campaña y que, por lo visto está pretemporada, continúan muy vigentes. Su entrenador, Diego Martínez, es el auténtico líder de un conjunto que mantiene la fortaleza defensiva, el funcionamiento como bloque, la velocidad en ataque y el buen manejo del balón parado como claras señas de identidad.

El Granada ha realizado hasta ahora siete incorporaciones, entre las que destaca el regreso a España del exdelantero amarillo Roberto Soldado, que está llamado a ser la referencia ofensiva.

El central colombiano Neyder Lozano, el también central portugués Domingos Duarte, el centrocampista camerunés Yan Eteki, el medio venezolano Yangel Herrera y el extremo también venezolano Darwin Machís son otros de sus cinco refuerzos. El último en llegar ha sido el también central José Antonio Martínez quien, como ocurriera el pasado verano, llega cedido por el Eibar.

Los dirigentes y técnicos esperan apuntalar el equipo antes de que se cierre el mercado con, como mínimo, un lateral izquierdo y otro delantero (está próximo a cerrar la cesión de Carlos Fernández, procedente del Sevilla).

En cuanto a las salidas, el club ha logrado mantener la base de la plantilla de la campaña anterior, por lo que los siete jugadores que tenían contrato y ya no están en el equipo andaluz, eran futbolistas que no contaban en demasía para Martínez o que regresaban de cesiones y continuaban sin sitio en el plantel.

ILUSIÓN DISPARADA // El excelente papel realizado el pasado curso y la ilusionante pretemporada ha provocado que la afición haya respondido, con alrededor de 13.000 abonados ya (cerca de 5.000 más que el pasado curso), así como una importante expectación alrededor del Granada ante el regreso a la élite.