El rival del Villarreal en la segunda eliminatoria de la Copa del Rey, el Orihuela CF, quiere engalanar su estadio con vistas a la llegada, este sábado 11 (21.00 horas), de uno de los grandes de la Primera División. De hecho, el campo municipal de Los Arcos dispondrá de las gradas supletorias para dicho duelo, que sustituyen a las derruidas por los daños de las inundaciones de septiembre.

El club escorpión ha tomado dicha medida por cuenta propia. Las gestiones para la colocación definitiva de esos graderíos, que debían pagarse con la ayuda prometida por la RFEF, apenas habían avanzado y resultaba imposible que estuvieran disponibles para el partido sabatino. Con ello, Los Arcos ganará 2.500 butacas y la capacidad llegará a los 4.000 espectadores previstos.

Por ello, ante esta situación, el club oriolano decidió tomar las riendas, dando un paso definitivo que permitirá a todos los aficionados disfrutar del encuentro ante un rival de Primera División sin moverse de Orihuela. La entidad ha adoptado la decisión de alquilar y pagar de sus fondos las gradas supletorias.

En varias zonas del campo

Además, no solo pondrán estos asientos portátiles en la grada de Preferencia baja. También los instalarán detrás de la portería en el fondo que da al río.

El club de la Vega Baja va a desembolsar unos 70.000 euros para que todo esté en condiciones cara a un histórico partido en el que esperan recaudar unos 60.000 euros. Según apuntan desde la entidad escorpión, el Orihuela no ganará un dinero extra de una eliminatoria que estaba destinada para ello, pero sí podrá dar cabida a los 1.000 seguidores de Villarreal que ya han solicitado entradas y a su propia afición, que acudirá en masa.