EEl equipo blanquiazul regresa a Primera Regional cinco años después, lo hace tras ser uno de los mejores segundos clasificados de la categoría, únicamente superado por el Benicarló B. El ascenso se ganó en el vestuario, con la unión de una plantilla casi sin fisuras, en la que las ausencias, bien por lesión o bien por sanción, no se notaron. Estos rasgos característicos son los que se quiere mantener en el equipo este año en Primera Regional.

El objetivo del equipo peñiscolano no es otro que lograr la permanencia en la categoría y asentarse en Primera Regional, a diferencia de lo acontecido en campañas anteriores en las que tras ascender el Peñíscola volvía a descender en su regreso sin opción de consolidarse.

Fichajes foráneos // Para ello se ha mantenido la misma política, se ha reforzado la plantilla con futbolistas de fuera, algo que no sucedía en épocas pretéritas, y se ha potenciado el equipo para formar un bloque de garantías que no sufra lo más mínimo en esta ocasión. Entre los refuerzos destacan los defensas centrales Javi Corella, del Benicarló B, y Sergio Mateu, que no compitió la pasada temporada, y dos jóvenes valores del filial benicarlando, campeón el año pasado, el extremo Kasuan y el delantero Moha.

Además, también llegan desde el Càlig otros tres fichajes, se trata de los mediocentros Jorge Esbrí y Javier Mellén y el atacante Irigaray. El capitán de la nave volverá a ser un año más Álex Alonso, que intentará llevar al Peñíscola a cimentar la consolidación en la categoría. Otro aspecto importante que ha cambiado a nivel de club es la llegada de Jesús Fernández y su junta directiva, que desembarcó la pasada campaña y ha profesionalizado el club en el apartado más institucional.

En la vertiente social la afición estuvo al lado del equipo en todo momento la pasada campaña, tanto en el Benedicto XIII como en algunos desplazamientos y se espera que en regreso a Primera Regional no falle, será importante para el equipo que sea el futbolista número 12.